Cadáveres de animales, olor ácido y aguas turbias: así fue el panorama con que se encontraron esta mañana (jueves) quienes llegaron a la playa de Tel Aviv. Esta mañana (jueves), el Ministerio del Interior anunció la prohibición de ingresar a las playas de la ciudad tras la descarga de aguas residuales directo al mar.
En los últimos años, ante eventos de fuertes tormentas, en especial en esta época del año, las aguas del sistema de drenaje municipal son vertidas al mar. Eso incluye residuos de suciedad, aceites y otros contaminantes recogidos de los alrededores de la ciudad y de las carreteras cercanas.
Ayer, luego de las fuertes lluvias que cayeron en el centro del país y la insuficiencia del sistema de drenaje que conduce las aguas residuales a la planta de tratamiento de Gush Dan (región metropolitana de Tel Aviv), se decidió deliberadamente verter esas aguas sin tratamiento al mar, lo que provocó la fuerte contaminación. Tal polución era visible incluso en el Rio Yarkon, que bordea la ciudad de Tel Aviv.
Los surfistas y bañistas que llegaron a las playas de Tel Aviv esta mañana se mostraron disconformes con la medida de las autoridades. Meir Elharar, surfista de la zona, señaló: “El municipio no se preparó de antemano y no colocó filtros en las salidas del alcantarillado al mar. Toda la suciedad que se acumuló en esos caños durante el verano, salió toda junta. Había cadáveres de animales, ratas y ratones”.
"Fueron 24 horas de infierno ambiental", expresó. “Los clubes de surf cancelaron sus actividades porque es imposible meterse al agua. Los que entraban, salían con mareos y un olor que se impregnaba en el cuerpo. Todos sabían que iba a llover, pero no hicieron nada para estar preparados”, agregó.
Un surfista veterano de las playas de Tel Aviv también manifestó su enojo. “El mar ahora está negro y huele mal. Es imposible meterse. Es un fracaso que lleva años y que nadie hace nada por resolver. Es un perjuicio para los bañistas, los surfistas y también los animales, una conducta delictiva hacia el medio ambiente”, sostuvo.
La Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de Gush Dan declaró que “debido a las altísimas cantidades de agua de lluvia que se acumularon ayer en el área metropolitana y la imposibilidad de absorberla en la planta, se llevó a cabo un proceso controlado de vertido a la playa. Se trata de un procedimiento que se lleva a cabo esporádicamente y de acuerdo con todas las aprobaciones necesarias y las disposiciones de la ley”.