La policía de Israel informó que 16 manifestantes ultraortodoxos fueron arrestados el lunes por la noche en Jerusalem en una protesta contra las medidas de cierre a causa del coronavirus. Las manifestaciones contra la cuarentena se extendieron en algunos barrios por tercera noche consecutiva.
Cientos de judíos ultraortodoxos salieron a las calles a protestar en contra del encierro de una semana impuesto desde el viernes pasado en Romema, Bar-Ilan y otros barrios de la capital israelí.
La manifestación se tornó violenta el lunes por la noche con incendios de contenedores de basura, insultos contra las fuerzas policiales, gritos de “nazis” contra los oficiales y el derribamiento de las vallas erigidas en torno a las áreas identificadas como puntos críticos de coronavirus.
“El despliegue continúa contra los agitadores para restablecer el orden público”, informó la policía después de la violenta protesta que siguió hasta altas horas de la noche.
Muchos de los barrios afectados por el cierre son religiosos. Los manifestantes alegaron que se apunta contra ellos de manera injusta cuando los funcionarios de la salud se abstienen de cerrar áreas no ultraortodoxas que también muestran un aumento en los casos de COVID-19.
El lunes por la mañana, legisladores y ministros de las facciones ultraortodoxas en la Knesset expresaron preocupaciones similares en una reunión con el primer ministro Benjamín Netanyahu.
El presidente del Comité de Finanzas de la Knesset, el parlamentario por Yahadut Hatorah Hameuḥedet, Moshe Gafni, sostuvo que presentaría una moción para establecer una comisión parlamentaria de investigación sobre el proceso de toma de decisiones en el Ministerio de Salud que resultó en el cierre de comunidades ultraortodoxas.
El miembro de la Knesset por la alianza Yamina, Bezalel Smotrich, solicitó investigar la brutalidad policial contra los manifestantes, luego de que aparecieran videos que mostraban un presunto uso excesivo de la fuerza por parte de agentes de la policía.