Un grupo de piratas informáticos dio a conocer el sábado que había logrado infiltrarse en los servidores de la compañía israelí de financiamiento de automóviles KLS Capital y extraer una cantidad sustancial de información de clientes. El grupo Black Shadows comenzó a publicar segmentos de la información robada, que incluían datos sobre clientes de la firma en Israel y en el extranjero.
Según pudo saber Ynet, los piratas informáticos borraron también en el ataque información de los servidores de la empresa. El grupo de hackers es el mismo que llevó a cabo un gran ciberataque contra la compañía de seguros Shirbit de Israel en diciembre, durante el cual exigieron un rescate de 200 bitcoins, en ese momento 3,8 millones de dólares, por la devolución de la información secuestrada.
Los piratas informáticos exigieron el sábado que KLS pagara un rescate por valor de 1,9 millones de shekels (570.000 dólares) en bitcoins, un pedido que la empresa rechazó. KLS indicó que había recibido asistencia del área de ciberseguridad del Estado para detener el ataque y el intento de extorsión.
La Autoridad Nacional de Seguridad Cibernética señaló tras el ataque que es importante que incluso empresas pequeñas cuenten con sistemas de defensa sólidos contra posibles piratas informáticos.
Por su parte, el doctor Harel Menashri, director del Departamento de Cibernética del Instituto de Tecnología de Holon y ex miembro del servicio de seguridad nacional Shin Bet, indicó que según él, el pedido de rescate tuvo la intención de enmascarar el verdadero propósito del ataque.
Menashri afirmó que el objetivo fue exponer las debilidades de empresas israelíes en materia de seguridad. “Está claro que el ataque no se llevó a cabo con el propósito de pedir un rescate, como afirman los piratas informáticos, sino que los propósitos son otros. El rescate es una cortina de humo al igual que el episodio con Shirbit", concluyó.
