Cuatro días después de la reapertura de los jardines de infantes en Israel, el Ministerio de Salud confirmó este jueves que 34 maestros, entre 1.506 testeados, dieron positivo de coronavirus. Las autoridades temen un aumento de la morbilidad, tal como se observó tras la primera reapertura en mayo.
En cuanto a los casos diarios, continúa la tendencia a la baja: el último informe arrojó 1.089 nuevos infectados, lo que acerca a Israel al objetivo de bajar de los 1.000 casos por día antes de levantar el cierre general impuesto por el gobierno.
El este miércoles, se realizó un total de 40.915 pruebas, que determinó una tasa de positividad del 2,7%; muy por debajo del 14% que se llegó a registrar antes de que comenzara el bloqueo a mediados de septiembre.
Las pruebas del miércoles incluyeron un muestreo aleatorio dentro de dos sectores de riesgo: los geriátricos, que durante la primera ola fueron gravemente afectadas por el virus, y las yeshivás ultraortodoxas, donde la morbilidad se ha mantenido alta durante toda la pandemia.
Las 12.835 pruebas que se hicieron en los hogares de ancianos arrojaron una tasa de positividad del 0,4%; mientras que las 1.560 realizadas en yeshivás mostraron una tasa de infección del 1,6%.
Actualmente, en todo Israel, hay 1.062 infectados que se encuentran hospitalizados. Entre éstos, 518 atraviesan un estado crítico y 231 requieren respiradores. El número total de muertos es de 2.292, con una tasa de mortalidad del 0,74% (es decir, uno de cada 134 pacientes sucumbe ante complicaciones relacionadas con el virus).