El Ministerio de Salud confirmó el lunes que el recuento de pacientes con coronavirus en Israel ha aumentado a 1.442 casos. Hay 29 pacientes en estado grave y 41 ya se han recuperado del virus.
El lunes se sospechó una segunda muerte por coronavirus en el Hospital Ichilov de Tel Aviv. Un hombre de unos 60 años llegó a la sala de emergencias por su propia voluntad, quejándose de dolores en el pecho y dificultad para respirar. Dos horas después de su admisión en una unidad especial de coronavirus, el hombre colapsó y fue declarado muerto. El personal médico se encuentra examinando si había contraído el virus y había sucumbido a él.
También el lunes, los funcionarios israelíes no pudieron llegar a un acuerdo sobre medidas adicionales para contrarrestar la propagación del coronavirus, pero el primer ministro Benjamin Netanyahu ordenó a la policía que intensificara la aplicación de las medidas existentes.
Netanyahu también instruyó a los funcionarios a presentar al gobierno un plan para aumentar aún más las restricciones, buscando mantener a los israelíes en sus hogares y permitiendo que las personas salgan sólo para comprar alimentos y suministros médicos o para un trabajo vital.
Sobre la mesa estaba la posibilidad de detener todo el transporte público por un período de siete días como parte de los esfuerzos para contener la propagación del coronavirus.
Parece que los bancos y otros servicios vitales también podrán permanecer abiertos.
Se pidió a un panel de expertos económicos que presentara el martes un resumen de un paquete de ayuda para los israelíes despedidos u obligados a tomar un permiso sin goce de sueldo.
A los funcionarios también se les ha encomendado la tarea de diseñar un plan para aumentar las pruebas del virus que debe incluir la localización de casos infectados, así como las pruebas de encuestas para identificar áreas infectadas.
El subdirector de Salud, profesor Itamar Grotto, comentó el lunes que Israel estaba aumentando el número de pruebas para el virus y que ha ordenado a Estados Unidos 500.000 kits adicionales.
"Desafortunadamente, esas pruebas no podrán decirnos de manera definitiva si un paciente con coronavirus ya no es contagioso o si es inmune a una infección adicional", añadió Grotto.
El contralor estatal Matanyahu Englman advirtió el lunes en su informe anual que el sistema de salud israelí no está preparado para lidiar con la magnitud de los pacientes durante una pandemia debido a la escasez de camas de hospital, ventiladores y otros suministros médicos. El informe fue preparado antes del brote de la pandemia de coronavirus.