Este jueves, un importante grupo de residentes de la ciudad árabe de Umm al-Fahm realizó una huelga general en protesta por la violencia que azota a su comunidad: en las últimas 24 horas, dos personas fueron asesinadas en el poblado.
Los negocios, diferentes instituciones y escuelas cerraron en la ciudad, hogar de casi 60.000 residentes, durante toda la jornada. Los lugareños, además de abandonar sus puestos de trabajo, también planean realizar una manifestación frente a la estación de policía de la ciudad.
Desde principios de 2021, el total de árabes israelíes muertos por la violencia comunitaria es de 108, solo cinco menos que el número del año pasado, que registró un récord absoluto. "Desafortunadamente, hay una falta total de seguridad", dijo el alcalde Samir Mahamid a Ynet en una entrevista.
Según el grupo contra el crimen Aman, del total de muertes, 96 árabes murieron a causa de disparos, otras cinco fueron apuñaladas y tres fueron golpeadas o estranguladas hasta la muerte. Además, dos murieron por cargas explosivas, una víctima fue lapidada y otra fue atacada con fuego.
Del total de las muertes, ocho se produjeron en Um al-Fahm y ninguna fue resuelta por la policía. "Los agentes tienen que hacer mucho para resolver estos casos de homicidio, es inconcebible que hayan ocurrido ocho asesinatos en Umm al-Fahm en menos de un año, tres en la última semana", dijo Mahamid. Y añadió: "Por otro lado, nosotros como sociedad también debemos tomar las riendas del asunto".
Israel ha registrado 1.623 asesinatos en el sector árabe desde el año 2000, pero solo el 23% fueron resueltos por la policía en comparación con más del 70% entre los judíos israelíes.