El Ministerio de Defensa y la Administración Civil de Israel inició en la mañana del martes la evacuación de siete edificaciones ilegales en Adora, asentamiento judío cerca de Hebrón, en Cisjordania.
Las siete edificaciones se instalaron en tierras del Estado y hace unos días un representante del Ministerio de Defensa les informó a sus habitantes que serían evacuados en breve. En respuesta, los vecinos presentaron una apelación en la Corte Suprema que fue denegada y habilitó la evacuación de este martes.
Tomal Rahamin, presidente del asentamiento de Adora, se expresó con “mucho dolor” por el proceso de evacuación. “Estamos en una misión de gran amor por el país y ahora estamos atravesando una gran agitación”, dijo en defensa de las familias evacuadas, y a favor de los movimientos que amplíen la presencia israelí en Cisjordania.
Por su parte Yohai Damari, jefe del Consejo Regional del Monte Hebron, pidió “que la justicia detenga este escándalo”. El funcionario convocó al primer ministro Naftalí Bennett y a Benny Gantz, ministro de Defensa, para que “detenga esta evacuación innecesaria y estas escenas que nadie quiere ver”.