Cientos de dolientes asistieron este miércoles por la tarde al funeral de Aryeh Schupak, el estudiante de yeshiva israelí-canadiense de 16 años que murió en un atentado terrorista en Jerusalem en la mañana del miércoles.
Su cortejo fúnebre partió del barrio de Har-Nof hacia el cementerio de Har Hamenuchot. Luchando contra las lágrimas, el padre del adolescente, el rabino Moyshi Schupak, se despidió de su hijo de forma sentida. El diputado Itamar Ben Gvir, el ex alcalde de Jerusalem Nir Barkat y el rabino jefe de Har Nof, David Yosef, fueron algunos de los funcionarios que asistieron al funeral.
Schupak fue herido de muerte en la explosión en una estación de autobuses cerca de la entrada de la ciudad y sucumbió a sus heridas poco después. Otra persona resultó herida de gravedad en el atentado y más de 20 resultaron heridas de diversa consideración. Un compañero de Schupak también sufrió heridas de moderadas a graves en el atentado.
Las autoridades creen que el diseño de la bomba coincide con el de otro explosivo que detonó unos 30 minutos después en otra parte de la ciudad, ambos activados a distancia.
Según las evaluaciones preliminares de los funcionarios de seguridad, se cree que varios autores participaron en el atentado, que parece haber sido planeado con mucha antelación sin dirección externa o de arriba abajo de ningún grupo terrorista. Se estima que la célula terrorista estaba familiarizada con la zona y exploró los alrededores antes de elegir el momento y el lugar exactos del atentado, con el objetivo de maximizar la cantidad de víctimas.
La carga explosiva en sí era relativamente pequeña, pero estaba densamente cargada de clavos y metralla metálica que causó la mayor parte de los daños. Otra carga explosiva detonó unos 30 minutos después en el cruce de Ramot, en Jerusalem, mientras servicios de emergencia seguían en el primer lugar.
Las autoridades israelíes están investigando si la célula entró en Israel desde Cisjordania, pero no descartan que los autores puedan ser también residentes de Jerusalem Este.
