Veinte años después de que Yahalem Tadasa emigrara de Etiopía a Israel, finalmente se reunió con sus hijos esta semana.
Abrarao, de 30 años, y Kano, de 28, abrazaron a su padre y no pudieron contener las lágrimas a su llegada al aeropuerto.
“Es un sueño hecho realidad. No puedo creer que esté viendo a mis hijos después de 20 años. Una batalla de años por el derecho a ver a mis hijos ha llegado a su fin", expresó Tadasa.
Abrarao y Kano forman parte de un grupo de 160 inmigrantes de Etiopía que llegaron a Israel el martes.
“Estuvimos todo el tiempo juntos desde que llegaron. Ninguno de nosotros durmió. Hablamos mucho y tratamos de compensar los largos años que esperé a que vinieran”, contó.
"Esto es realmente un sueño hecho realidad. Todos los abrazan. Nos está costando darnos cuenta de que hemos cumplido nuestra misión de traerlos aquí después de largos años de lucha", agregó.
La ministra de Inmigración, Pnina Tamano-Shata, la primera mujer nacida en Etiopía en ingresar a la Knesset, solicitó al entonces ministro del Interior, Arye Deri, que permitiera la inmigración de los hijos de Tadasa hace dos años y medio.
“Cuando hizo aliá en 2002, le prometieron que sus hijos también vendrían”, le escribió la ministra a Deri. “Es extremadamente desafortunado que el Sr. Yahalem Tadasa y sus hijos sean sometidos a este terrible sufrimiento por su deseo de regresar a Sion”, aseguró.
Como parte de la Operación Zur Israel, se espera que 3.000 nuevos inmigrantes de Etiopía lleguen a Israel en los próximos meses y se asienten en cinco centros de absorción establecidos por el Ministerio de Aliá e Integración.
En una primera etapa de la operación, 2.000 personas ya llegaron al país en una medida impulsada por Tamano Shata durante el anterior gobierno.