La compañía dijo que "la electricidad es un producto esencial fuera del conflicto"
El sindicato de trabajadores de la Compañía Eléctrica de Israel anunció el jueves por la mañana que no repararán las líneas eléctricas a la Franja de Gaza que fueron dañadas por el fuego de Hamás hasta que la organización terrorista no devuelva a Israel los cuerpos de los soldados caídos Hadar Goldin y Oron Shaul, así como el ciudadano israelí Avera Mengistu, que se cree que se encuentra cautivo por Hamás desde 2014.
En respuesta al anuncio del gremio, la compañía dijo que se trata de "una empresa gubernamental, sujeta a las disposiciones de la ley, y cree que la electricidad es un producto esencial fuera del conflicto".
El sábado, la compañía eléctrica anunció que cinco de las diez líneas de alto voltaje que suministran energía a Gaza habían sido dañadas por el lanzamiento de cohetes desde la Franja. La empresa agregó que las líneas no serán reparadas hasta que sus trabajadores puedan acceder a ellas de manera segura.
El anuncio del sindicato llega después del llamado del hermano de Oron Shaul, Aviram Shaul, de no concluir la ofensiva militar contra las facciones terroristas de Gaza hasta que se recuperen los cuerpos de su hermano y Goldin, junto con Mengistu e Hisham Al-Saeed, un beduino israelí que permanece cautivo en Gaza desde abril de 2015.
"Los miembros de alto rango tanto de la defensa como de los escalafones políticos han enfatizado constantemente que Israel hará todo lo que esté en su poder para recuperar a Oron, Hadar y los otros cautivos retenidos en Gaza. Sin embargo, estas aspiraciones parecen disiparse cada vez", dijo Shaul.
"Escuché a muchas personas en las noticias decir que el tema de los prisioneros y las personas desaparecidas no debería ser un requisito previo para poner fin a esta operación, y yo me pregunto, si no es ahora, ¿cuándo?", agregó.
