Un proyecto de ley presentado este jueves por el partido ultraortodoxo Shas pretende penalizar todo tipo de rezo judío en el Muro de los Lamentos que no cumpla con la estricta costumbre ultraortodoxa.
Si se aprueba la propuesta, promovida por el líder del partido, Aryeh Deri, se tipificaría como delito vestir de forma inmodesta y tocar música en el lugar. La votación sobre el proyecto de ley se celebrará la próxima semana.
El Muro de los Lamentos, uno de los lugares más sagrados del judaísmo, fue en los últimos años escenario de agrias disputas entre el estamento religioso ultraortodoxo de Israel y las corrientes más liberales del judaísmo, incluidas las feministas del movimiento Mujeres del Muro (WOW).
El proyecto de ley estipula multas por valor de 10.000 shekels (2.867 dólares) o penas de seis meses de prisión por violar la costumbre del statu quo codificada por el Consejo del Gran Rabinato y el rabino del Muro de los Lamentos, que incluye un estricto código de vestimenta para las mujeres.
Según la propuesta, algunas acciones estarían prohibidas en el Muro de los Lamentos, entre ellas celebrar cualquier ceremonia religiosa que no se ajuste a las costumbres locales y pueda ofender a quienes rezan en el complejo. Además, llevar atuendo inmodesto, prestar servicios religiosos de cualquier tipo sin la debida autorización, tocar instrumentos musicales, escuchar música y cantar sin permiso, así como las oraciones mixtas, todo ello estará penado por la ley.
También se prohíben determinadas ceremonias en el patio de mujeres del Muro de los Lamentos, entre ellas llevar o leer la Torá, tocar el shofar, llevar talit o ponerse tefilín.
La propuesta llega tras el recurso presentado ante la Corte Suprema por las "Mujeres del Muro", que piden libertad religiosa en el Muro de los Lamentos. El proyecto se debatirá a finales de febrero.
Miembros del partido Shas defendieron la ley propuesta. Uriel Busso, el miembro de la Knesset que redactó el proyecto de ley junto con el ministro de Servicios Religiosos, Michael Malkieli, dijo: "¿A alguien se le ocurriría entrar en una mezquita vestido de forma inapropiada? Todo el mundo comprende la santidad del Muro de los Lamentos: necesitamos una ley que regule esta cuestión".
Y añadió: "Por desgracia, el Muro de los Lamentos se convirtió en los últimos años en un lugar de conflicto y protestas, dirigido por un grupo extremista y radical cuyo único propósito es profanar el Muro de los Lametus y herir los sentimientos de la mayoría del pueblo judío".
Por su parte, el líder del Partido de Unidad Nacional, Benny Gantz, criticó la propuesta en Twitter. "Nadie tiene propiedad sobre el lugar más sagrado del pueblo judío. El Muro de los Lamentos pertenece a todos, religiosos y laicos, de derechas y de izquierdas, y depende de nosotros mantenerlo como un lugar de unidad para todo el pueblo".
"Pido a Netanyahu que mantenga la política fuera de nuestro lugar más sagrado, que no ponga una brecha entre el Muro de los Lamentos y el pueblo judío", manifestó el ex ministro de Defensa.
La ley también fue criticada por miembros de la coalición. La ministra de Cultura y Deportes, Miki Zohar, escribió en Twitter que el Muro de los Lamentos "pertenece a todo el pueblo de Israel y es sagrado para todos los judíos, no hay necesidad de leyes para preservar su santidad. Mantener el statu quo es fundamental para preservar nuestra unidad".
