Viaje Bnei Brith
Viaje Bnai Brith
Bnai Brith
Dustin Guerra, periodista panameño, y la Ciudad Vieja de fondo: "Hay lugares en los que conviven actores que en teoría no podrían convivir"

Ver para creer, escuchar para contar

Un grupo de 14 periodistas latinoamericanos, ninguno de ellos de origen judío, viajó a Israel para conocer de primera mano a un país que no pasa desapercibido a nivel mundial. “Un verdadero regalo”, “me fascinó” y “me cambió la percepción” fueron, en líneas generales, los conceptos de los asistentes entrevistados por Ynet Español.

Tom Wichter |
Published:
En los últimos días algunos medios de comunicación de América Latina le dedicaron más espacio del habitual a la realidad israelí. Y esta vez no fue por un recrudecimiento de un conflicto con los palestinos, ni específicamente por las recientes elecciones, sino por un tema menos urgente y fuera de agenda: la visita de un grupo de periodistas, ninguno de ellos de origen judío, que fueron invitados a conocer el país. “Entendemos que la mejor manera de explicar el Estado de Israel es que la gente pueda verlos con sus propios ojos y preguntar libremente”, definió Eduardo Kohn, director de Bnai Brith América Latina, la fundación que auspició la propuesta. Así como en otras oportunidades la organización realizó actividades similares con políticos o diferentes personalidades de la cultura, esta vez Bnai Brith optó por acercar a Israel a 14 periodistas de cinco países de América Latina. Durante diez días recorrieron Israel en toda su extensión, entrevistaron a diputados, se sentaron con autoridades del ministerio de Relaciones Exteriores, visitaron empresas, conversaron con ciudadanos que residen cerca de la frontera con Gaza y completaron un programa de actividades que en líneas generales los asombró de manera positiva. “El viaje me voló la cabeza. Hay países bellos y previsibles, en Europa por ejemplo, pero Israel me fascinó”, expresó la argentina Laura Di Marco horas después de su regreso, al abrir su columna en el programa Pensándolo Bien (Radio Mitre). Y como la suya, ante las consultas de Ynet Español hubo muchas respuestas similares entre los asistentes, que evidencian diferencias entre las expectativas previas y el resultado de la experiencia.
2 צפייה בגלריה
Viaje Bnei Brith
Viaje Bnei Brith
Dustin Guerra, periodista panameño, y la Ciudad Vieja de fondo: "Hay lugares en los que conviven actores que en teoría no podrían convivir"
(Bnai Brith)
Dustin Guerra, periodista de Panamá, aseguró que “en América Latina se habla mucho de conflictos, inseguridad, guerra y diplomacia, pero cuando uno llega a Israel es muy diferente”. Luis Alberto Cano, también argentino, admitió haberle dedicado horas de lectura y estudio a la historia israelí “para tener una idea sobre dónde iba a estar parado”, y consumada la travesía la calificó como “un verdadero regalo, impensado, volví sorprendido de un viaje espectacular”. Pablo Rodillo Martínez es chileno y fue con algo más de conocimiento previo en la valija: su tesis para recibirse de periodista la realizó sobre el conflicto palestino-israelí. “Pero fue hace mucho tiempo, cuando la estaba terminando murió Arafat y tuve que cambiar todo”, recordó, y agradeció esta experiencia que le sirvió para “entender e instalarme geográficamente para cuando me toque hablar de Israel”. Rodillo Martínez, posiblemente entre los consultados el que más sabía de la historia del conflicto, destacó la tranquilidad de la vida cotidiana de la sociedad israelí: “Percibí un país muy seguro, sin miedo, que se desenvuelve tranquilo. Puede resultar chocante que revisen los bolsos antes de ingresar a un centro comercial, pero pude pasear por Jerusalem hasta altas horas de la noche y nunca sentí que me pudiera pasar algo.”
2 צפייה בגלריה
Viaje Bnei Brith
Viaje Bnei Brith
El grupo de periodistas completo disfrutando de una cena en Jerusalem
(Bnai Brith)
“Me llamó la atención que hay lugares en los que conviven actores que en teoría no podrían convivir”, manifestó en ese sentido Guerra, mientras que a Cano lo marcó especialmente una conversación que mantuvo con una mujer que vive en un kibutz cercano a la frontera con Gaza: “Me habló desde las tripas sobre la sensación que significa vivir sabiendo que en cualquier momento puede sonar la sirena. Me dijo que no solamente me lo contaba ella como madre israelí, sino también pensando en las madres palestinas, porque así no se puede vivir”. La agenda del viaje incluyó visitas a empresas de alta tecnología, uno de los pilares de la economía israelí, y ese fue uno de los principales temas que replicaron los periodistas en los medios de comunicación para los que trabajan. “Me da la sensación de que se trata de un país muy pujante, algo me habían dicho, pero no me lo imaginaba de esa forma”, resumió Cano al respecto. “Me impactó la modernidad de Tel Aviv y que su población es muy joven, algo que puede ser importante a futuro”, aseguró a su vez Guerra. Del otro lado, al este del país, Di Marco destacó la espiritualidad de Jerusalem: “En esa ciudad se inició la historia de la humanidad y cuando uno está ahí se siente”, afirmó, y agradeció la generosidad de la organización porque “armaron un grupo con periodistas de orígenes cristianos y nos llevaron a muchos lugares sagrados del cristianismo”. Así como para los periodistas asistentes, desde la organización del viaje también consideran que el balance es positivo. “Además de haber leído o escuchado las notas que publicaron todos los periodistas que viajaron, nos dimos cuenta de que a cada uno de ellos se les abrió un mundo nuevo”, reflexionó Kohn, el director de Bnai Brith América Latina, quien garantizó que esta experiencia se repetirá. Ya sea con trabajadores de prensa, artistas u otras áreas de referencia para las sociedades mundiales, el objetivo será el mismo: que se conozca a Israel de la manera más directa posible.
Comentarios 0