Yigal Amir informó que se echó para atrás de su decisión de realizar una huelga de hambre, luego de que su esposa anunciara esta mañana que Amir se negaba a alimentarse a causa de la medida en la que se le prohibió el uso del teléfono durante dos meses.
La decisión de negarle la comunicación telefónica a Amir se tomó luego de que el famoso rapero israelí Hatzel hiciera pública una conversación con el detenido.
La semana pasada el artista publicó una grabación de su charla con Amir desde prisión, en la que el detenido le consulta si Hatzel estaba listo para formar parte de su campaña. El rapero respondió negativamente de forma inmediata y Amir cortó rápidamente la llamada.
La grabación también comenzó a despertar el repudio por parte de la clase política israelí. El líder de Avodá, Amir Peretz, fue el primero en publicar en su cuenta de Twitter: "Yigal Amir, asesino del primer ministro Itzjak Rabin, terminará su vida en prisión hasta su último día, sin ninguna capacidad de envenenar a la sociedad israelí".
"Mi esposo Yigal inició una huelga de hambre en protesta por la prohibición de dos meses sin llamados telefónicos, que se le impuso por hablar con Hatzel, y también en contra de su detención durante años sin la aprobación de un tribunal. ¡Por favor, difunde eso!", escribió esta mañana Larisa Trembovler, esposa del detenido, en su página de Facebook.
El servicio penitenciario comunicó: "A la luz de la violación de las reglas de uso del teléfono del prisionero Yigal Amir para conducir una organización política, se le inició un procedimiento de denegación de llamadas telefónicas durante dos meses".
En respuesta, el prisionero informó al comandante de división de su intención de pasar hambre, de la que posteriormente se arrepintió.
First published: 15:56, 14.08.19
