El famoso “Valle de las Lágrimas”, testigo de una de las batallas más importantes de la Guerra de Yom Kipur, en 1973, fue limpiado de minas y entregado al kibutz El Rom para que desarrolle allí actividades agrícolas.
En el contexto del conflicto bélico iniciado sorpresivamente por Egipto y Siria hacia Israel, durante cuatro días se desarrolló allí una fuerte batalla ante un ataque del ejército sirio que intentó tomar el control de la zona. Las fuerzas israelíes, en inferioridad numérica, finalmente lograron que los sirios retrocedan hasta la frontera.
Tras el final de la guerra esa zona fue cerrada al acceso de civiles y hace un año, en un trabajo coordinado entre las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) y el Consejo Regional del Golán, se decidió restaurar el terreno. Así fue que se inició un operativo de limpieza de minas explosivas en las 43 hectáreas del lugar.
“Limpiamos este valle de minas que estuvieron enterradas aquí durante décadas, porque la lucha contra el mal chiita debe hacerse no sólo con fuego y hierro, sino también a través de una agricultura sionista genuina”, expresó el general Amir Baram en la ceremonia de entrega del terreno a las autoridades regionales del Golán.
“Es un sueño hecho realidad, un mensaje de paz y renovación, y de trabajo conjunto entre las FDI, los agricultores y los residentes”, respondió a su vez Haim Rokach, presidente del Consejo Regional del Golán.