La Corte Penal Internacional, que ya inició un proceso de investigación sobre presuntos crímenes de guerra cometidos por Israel en la guerra de 2014 ante Hamás, aseguró que los actuales enfrentamientos pueden ser objeto de nuevos estudios. Fatou Bensouda, fiscal del organismo, dijo que sigue de cerca los acontecimientos y que continuará con su trabajo a pesar de no contar con la cooperación del Estado judío.
"Estos son eventos que estamos monitoreando muy seriamente", declaró Bensouda. Y añadió: "Les recuerdo que ya se ha abierto una investigación (...) y la evolución de los sucesos actuales podrían servir de evidencia en muchos casos", haciendo referencia a la investigación formal que su oficina abrió en marzo por presuntos crímenes cometidos en 2014 tanto por las Fuerzas de Defensa de Israel como por Hamás.
"Advierto sobre esto para que el conflicto no se intensifique, y para que ambos bandos tener eviten llevar a cabo acciones que resulten en la comisión de crímenes (de guerra)", acotó Bensouda en referencia a las hostilidades en torno a la Franja de Gaza.
Si bien la investigación es "políticamente tensa", dijo Bensouda, negó las acusaciones del primer ministro Benjamín Netanyahu de que su oficina estaba sesgada o estaba señalando al Estado de Israel. "Es lamentable que el primer ministro reaccione de esta manera", afirmó la nacida en Gambia.
Cuando comenzaron las investigaciones por presuntos crímenes de guerra, las autoridades de Jerusalem, con el apoyo de Estados Unidos, rechazaron la membresía en el tribunal basado en el tratado, objetando su jurisdicción.
La Autoridad Palestina, que ejerce el autogobierno en Cisjordania pero no tiene poder en Gaza, es miembro de la Corte Penal Internacional y la ha instado repetidamente a enjuiciar a los israelíes por presuntos crímenes en las guerras de 2014 y 2008-09.
Más de 2.100 palestinos murieron en el conflicto de 2014 en Gaza, que duró siete semanas y vio una devastadora ofensiva israelí en el enclave, durante la cual miles de hogares fueron arrasados. Además, 73 israelíes murieron por los cohetes disparados desde el enclave hacia Israel.
Cuando se le preguntó sobre la investigación del tribunal, el portavoz militar israelí, teniente coronel Jonathan Conricus, dijo que las fuerzas israelíes estaban "comprometidas con el derecho internacional" y que los militantes de Hamás deberían ser procesados. "Son una organización terrorista reconocida a nivel mundial que debería rendir cuentas por sus crímenes, su flagrante desprecio por la vida humana", declaró para Reuters.
En Gaza, el portavoz de Hamás, Fawzi Barhoum, aseguró que los grupos militantes palestinos estaban llevando a cabo un "derecho natural de autodefensa" y que la CPI debería enjuiciar a los líderes israelíes. "Nuestro pueblo es víctima de la agresión llevada a cabo por la ocupación israelí, que está llevando a cabo todas las formas de asesinato y terrorismo contra nuestro pueblo", exclamó
La CPI, con sede en La Haya, es un tribunal internacional independiente que sucedió a los tribunales ad hoc de la ONU, que abordaron el genocidio de Ruanda y el conflicto yugoslavo de la década de 1990. Enjuicia a personas, no a países, cuando un Estado miembro no quiere o no puede hacerlo por sí mismo.