Las gestiones diplomáticas parecen haber llegado a su fin y el intercambio de prisioneros entre Israel y Siria se está convirtiendo en realidad, luego de que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) deportaran a dos pastores sirios que habían ingresado a territorio israelí.
Muhammad Ahmad Hussein y Tariq Rassab al-'Abidan, los dos deportados en cuestión, habían sido detenidos por el ejército en las últimas semanas luego de infiltrarse en el norte de Israel. Ambos fueron entregados a la Cruz Roja en el cruce de Quneitra, región siria en donde residen.
“Fueron liberados de la cárcel como parte de un acuerdo de intercambio de prisioneros con Israel, mediado por Rusia”, confirmó la televisión siria durante la tarde del jueves, horas después de que se supiera que una joven israelí estaba privada de su libertad luego de haber cruzado ilegalmente la frontera con Siria en la región de los Altos del Golán.
En Israel confían en que el intercambio de prisioneros finalizará pronto, ya que en la noche del jueves un avión despegó desde Israel hacia Moscú y se espera que en el viaje de vuelta regrese la israelí capturada.
Se estima que la mujer israelí cruzó la frontera a pié, aunque eso se sabrá con certeza una vez que la joven sea interrogada por los servicios de inteligencia. Según Ron Ben Yishai, columnista de Ynet especializado en temas de seguridad, la israelí cruzó la frontera en una zona en la que no existe una valla perimetral, pero cuyo terreno es de muy difícil acceso para una persona.
La noticia se conoció ayer y en un principio el intercambio se iba a realizar a través de la deportación del terrorista Diab Khamouz y Nihal Al Makat, aunque los dos presos sirios en Israel no habían sido consultados sobre su liberación y esa situación demoró el acuerdo.