El Servicio de Seguridad Interna de Israel, Shin Bet, dio a conocer hoy (jueves) el descubrimiento de diversos intentos, por parte de Irán, de atraer a empresarios y académicos israelíes hacia el extranjero para su secuestro.
Shin Bet reveló algunos ejemplos, entre los que incluyó una invitación a una conferencia académica en Europa, el uso de la identidad de un periodista europeo e incluso el uso de la identidad de un multimillonario ruso.
La entidad explicó que logró desentramar en el último tiempo las operaciones de inteligencia de agentes iraníes contra académicos israelíes y ex miembros de alto rango del establecimiento de defensa.
"Se logró recopilar una gran cantidad de información sobre los miembros detrás de estas operaciones”
Fuente de Shin Bet
La metodología encontrada consiste en contactar a las personas haciéndose pasar por académicos, periodistas, empresarios y filántropos. En muchos de los casos, las identidades utilizadas corresponden con entidades o personas que realmente existen y desconocen el uso apócrifo de sus datos.
El Shin Bet sostuvo que se trata de un conocido método de operación utilizado por el sector de inteligencia de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria, las Fuerza Quds y el Ministerio de Inteligencia.
En uno de los casos, los agentes se hicieron pasar por un hombre de ascendencia rusa, que trabajaba para un multimillonario ruso llamado Andrei Andreev. El hombre, que se presentó como "Nikolai", pretendía supuestamente ofrecer asistencia a israelíes de ascendencia rusa. Ofreció encuentros en el extranjero e incluso señaló que Andreev contaba con vínculos políticos importantes que pudieran ser necesarios.
En otro caso, se utilizó un perfil ficticio de Instagram de una mujer llamada "Sofia Walsh", con el fin de establecer una relación amistosa o romántica con israelíes y secuestrarlos.
Una fuente importante del Shin Bet señaló que “las agencias de inteligencia iraníes utilizaron muchos perfiles” y que “se logró recopilar una gran cantidad de información sobre los miembros detrás de estas operaciones”. La fuente agregó que “La vigilancia de ciudadanos israelíes contribuyó a frustrar y prevenir incidentes graves”.