El ministro de Relaciones Exteriores, Yisrael Katz, se dirigió al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y escribió que "ya no toleraremos la guerra de desgaste que Hezbolá e Irán están tratando de imponer a Israel". El canciller israelí exigió que el Consejo de Seguridad actúe para implementar plenamente la Resolución 1701: "Hezbolá despliega deliberadamente sus armas dentro de la infraestructura civil, utilizando a la población como escudos humanos. Les pido que condenen enérgicamente el último ataque lanzado por Hezbolá por orden de Irán".
Katz escribió en su carta que "los continuos intentos de Hezbolá de atacar a Israel no se detienen. Con el fin de proteger a su población de los continuos ataques y amenazas de Hezbolá, Israel trabajó la semana pasada en Beirut contra los líderes de Hezbolá para frustrar su plan de infiltrarse en la región de Galilea y llevar a cabo ataques terroristas contra Israel, similares a los llevados a cabo por Hamas el 7 de octubre".
"Israel no está interesado en una guerra a gran escala. Sin embargo, tomaremos todas las medidas necesarias para protegernos a nosotros mismos y a nuestros ciudadanos de conformidad con el derecho internacional. Irán ha sido el cerebro detrás de la implacable agresión de Hezbolá contra Israel desde el 8 de octubre. Irán guía, entrena y arma a Hezbolá y sus representantes, incluidos los hutíes que operan contra Israel y la coalición internacional, y lanza misiles balísticos que amenazan a Ucrania y Europa. La comunidad internacional debe aumentar las sanciones contra Irán, incluida la designación de los Guardianes de la Revolución Islámica como organización terrorista", agregó Katz.
"Durante el último año, Israel ha demostrado su voluntad de buscar una solución diplomática con el Líbano que facilite el regreso seguro de los ciudadanos israelíes evacuados a sus hogares en el norte, así como el regreso de los ciudadanos libaneses desplazados a sus aldeas en el sur del Líbano. Este enfoque diplomático tiene por objeto garantizar la aplicación de la Resolución 1701. Sin embargo, Hezbolá se ha negado a apoyar un acuerdo diplomático, vinculando el asunto a un alto el fuego en Gaza. Si bien Israel ha mostrado una moderación extraordinaria en los últimos 11 meses, no toleraremos la actual guerra de desgaste que Hezbolá y su patrón, Irán, están tratando de imponer a Israel", añadió el canciller israelí.
"Ahora, este consejo debe actuar para lograr la plena implementación de la Resolución 1701. Hezbolá despliega deliberadamente sus armas dentro de la infraestructura civil en el Líbano, utilizando a la población civil como escudos humanos. Israel siguió este intento y actuará para proteger a su población de los ataques de Hezbolá. Israel advirtió con anticipación a los civiles en el Líbano que se encuentran cerca de edificios y áreas utilizadas por Hezbolá con fines militares, y les aconsejó que se mantengan alejados del área de inmediato, por su propia seguridad. Pido al Consejo de Seguridad que condene enérgicamente la reciente ofensiva lanzada por Hezbolá bajo la guía de su patrocinador iraní, y sus implacables intentos de desestabilizar la región", señaló luego Katz.
A la sombra de la expansión de la campaña en el norte, el aumento de los ataques en todo el Líbano y la escalada también de Hezbolá, que ha aumentado el círculo de lanzamiento de cohetes, en las últimas 24 horas se escucharon mensajes en Israel y en el Líbano que, de hecho, apoyan la aplicación de la Resolución 1701, con el fin de evitar una verdadera guerra. Katz dijo a docenas de ministros de Relaciones Exteriores que "si el mundo no retira a Hezbolá al norte del Litani de acuerdo con la Resolución 1701, Israel lo hará", mientras que el ministro de Relaciones Exteriores, Abdullah Bou-Habib, dijo que apoyaba la implementación de esta resolución.
Durante meses, Israel, junto con los diversos mediadores, se esforzó por lograr la plena aplicación de la resolución, en virtud de la cual la FPNUL y las fuerzas militares libanesas estaban estacionadas en la zona al sur del Litani, en el sur del Líbano, con el objetivo de distanciar a Hezbolá de la frontera. En los últimos días, altos funcionarios israelíes han afirmado, incluso públicamente, que las FDI están logrando distanciar a Hezbolá de la frontera a través de operaciones militares, posiblemente con el fin de presionar a la organización terrorista chiíta para que acepte un acuerdo.
Durante meses, Israel –junto con los diversos mediadores– se esforzó por lograr la plena aplicación de la Resolución 1701.
Cabe recordar que la resolución fue aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU en 2006 e incluía el establecimiento de un sistema militar mejorado de soldados de la FPNUL estacionados en la zona de amortiguación entre Israel y el Líbano desde el final de la Operación Litani en 1978. La decisión puso fin a la Segunda Guerra del Líbano entre Israel y Hezbolá, según la cual se suponía que Hezbolá se retiraría al norte del río Litani. Cabe señalar que hay puntos de la resolución sobre los que no hay acuerdo entre Israel y el Estado del Líbano, y hay otros desacuerdos no relacionados con la resolución que pueden interferir con los intentos de prevenir la guerra.
First published: 15:10, 23.09.24