Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) reanudaron este jueves los ataques contra objetivos terroristas en la Franja de Gaza, en el tercer día de la "Operación Escudo y Flecha" contra la Jihad Islámica.
Las FDI lanzaron un ataque contra posiciones de cohetes del grupo terrorista en el norte de la Franja, aproximadamente una hora después del lanzamiento de cohetes hacia Nirim y Kisufim, junto a la frontera con Gaza.
6 צפייה בגלריה
Refugio del comandante de la unidad de cohetes de la Jihad Islámica, Ali Ghali, tras un ataque aéreo israelí en Khan Younis, Gaza.
(Reuters)
No se informó de víctimas ni de daños materiales. El Consejo Regional de Ashkelon identificó impactos de cohetes en zonas abiertas de su territorio.
Por otro lado, las FDI anunciaron que habían atacado lanzadores de mortero de la Jihad Islámica en el norte de la Franja. Mientras tanto, los esfuerzos de mediación egipcia para lograr un alto el fuego continúan en un segundo plano.
En declaraciones al estudio de Ynet, el portavoz de las FDI, Read Almirante Dani Hagari, declaró que el ejército y el servicio de inteligencia interna Shin Bet están operando con una sinergia sin precedentes, lo que condujo a la exitosa muerte del jefe de las fuerzas de cohetes de la Jihad Islámica, Ali Hassan Ghali, en su escondite en Khan Younis, en el sur de la Franja.
"Debemos distinguir entre el ataque de anoche y los ataques que llevamos a cabo al principio del conflicto, porque es difícil localizar a gente escondida", sostuvo Hagari. "Descubrimos el refugio de Ghali y la Fuerza Aérea ejecutó un plan rápido, golpeando sólo su escondite. Ghali era responsable de los 507 lanzamientos de misiles hacia Israel [el miércoles] y fue abatido anoche, junto con otros dos militantes de alto rango que estaban con él", agregó.
"Las FDI y el Shin Bet llevan años trabajando juntos, pero lo que caracteriza el período reciente es que estamos generando capacidades conjuntas. Nos entrenamos juntos en métodos operativos. Por ejemplo, ayer mismo, el jefe del Estado Mayor [Herzi Halevi] y el director del Shin Bet, [Ronen Bar] se sentaron juntos en un búnker. Debe entenderse que el trabajo conjunto a través de la asociación en combate produce mejores resultados y logros. Nuestras capacidades se hacen más complejas, lo que nos permite lograr éxitos incluso en medio del conflicto", remarcó.
Según Hagari, "esta sinergia no sólo se pone de manifiesto en Gaza, sino también en Cisjordania, en el Mando Central, noche tras noche de forma coordinada. Este exitoso esfuerzo lleva años en marcha y mejora continuamente".
Cuando se le preguntó por qué la Jihad Islámica era capaz de lanzar cohetes a pesar de los ataques a las lanzaderas y los mecanismos de disparo, Hagari respondió: "nuestros ataques son precisos, pero atacar cohetes es siempre una cuestión compleja, especialmente cuando se encuentran en una de las zonas más densamente pobladas del mundo, y su ubicación cambia constantemente. Ya no nos enfrentamos a terroristas que vienen con un lanzador, sino a cohetes que están programados, y esto lo hace más complejo. Nos supone un reto y estamos desarrollando nuevos métodos".
¿Alto el fuego? La Jihad Islámica está siendo humillada
El portavoz de las FDI también se refirió a las negociaciones en curso sobre el alto el fuego, afirmando que "los escalones diplomáticos se están ocupando de ello, y hasta que haya un anuncio oficial y un acuerdo, seguiremos defendiendo y atacando según sea necesario. No es fácil tratar con un gran número de actores con los que tenemos que llegar a un acuerdo. Esperamos que así sea, pero hasta entonces, nada es definitivo".
A primera hora del jueves, un alto funcionario israelí declaró a Ynet que "a todos nos interesa concluir [la campaña], pero la Jihad Islámica está siendo humillada de tal manera que le cuesta aceptar su total falta de logros y las cero bajas israelíes".
Según informes de medios de comunicación extranjeros, el alto el fuego debía entrar en vigor a medianoche, pero las FDI mataron al jefe de la unidad de cohetes de la Jihad Islámica hacia la 1:30 de la madrugada, junto con su hermano -Mahmoud Hassan Ghali, comandante del ala militar del grupo- y otro operativo de la Jihad identificado como Mohammed Abed Al-Jawad.
Sin embargo, una fuente diplomática declaró que las negociaciones de alto el fuego continuaron después y durante toda la noche. Según la fuente, "el alto el fuego puede haberse retrasado, pero no se ha roto", y que "no hay duda de que la Jihad Islámica responderá a los últimos asesinatos".
Los mediadores internacionales -Egipto, Qatar, la ONU y Estados Unidos- trabajaron durante toda la noche para hacer avanzar las negociaciones sobre el alto el fuego. Las tres exigencias clave de la Jihad Islámica siguen siendo el principal obstáculo para un acuerdo.
En primer lugar, debe cesar la política israelí de asesinatos selectivos; en segundo lugar, la cancelación de la Marcha de las Banderas nacionalista del Día de Jerusalem, que el gobierno anunció el miércoles que seguirá su ruta habitual a través de la Puerta de Damasco de la Ciudad Vieja; y en tercer lugar, la devolución del cuerpo del prisionero de seguridad Khader Adnan, cuya muerte provocó el lanzamiento de 104 cohetes hacia Israel la semana pasada, lo que desencadenó el actual brote de enfrentamientos.
A primera hora del jueves, Hagari, portavoz de las FDI, declaró que de los 507 cohetes lanzados contra Israel por la Jihad Islámica palestina hasta el jueves por la mañana, unos 110 cayeron cerca de la frontera de la Franja de Gaza.
Uno de los incidentes se produjo cuando un cohete de un lanzamiento fallido cayó en Beit Hanoun, en el norte de Gaza, matando a Rami Shadi Hamdan, de 16 años, y Ahmed Muhammad a-Shabaki, de 51 años.
En un segundo incidente, un lanzamiento fallido de cohete en la ciudad de Gaza mató a Layan Bilal Mohammad Abdullah Mdoukh, de 10 años, y a Yazan Jawdat Fathi Elayyan, de 16, según las FDI.
También el jueves por la mañana, las FDI publicaron un vídeo de oficiales del Escuadrón 200 de la Fuerza Aérea de Israel en el que se puede oír cómo cancelan un ataque con drones en la Franja de Gaza contra un objetivo de la Jihad Islámica tras detectar a dos niños en la zona.
