El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, se reunió el jueves con el asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan. Estas conversaciones constituyen las de más alto nivel entre ambos países desde que el mes pasado asumió el poder el gobierno más derechista en la historia de Israel.
La visita de Sullivan se produce en medio de la inquietud que existe en Washington por las políticas de Netanyahu y por varios miembros de su coalición gobernante ultranacionalista y ultraortodoxa, que ya está adoptando una línea dura contra los palestinos y se espera que aumente la construcción en asentamientos judíos en Cisjordania.
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El asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, estrecha la mano del primer ministro Benjamín Netanyahu, durante la reunión mantenida entre ambos en Jerusalem.
(Oficina de Prensa del Primer Ministro)
Un comunicado de la oficina de Netanyahu informó que ambos funcionarios discutieron el programa nuclear de Irán y las formas de ampliar los acuerdos de normalización alcanzados con cuatro países árabes bajo la administración Trump.
"Conozco al presidente Biden desde hace 40 años como un gran amigo de Israel", le dijo Netanyahu a Sullivan, según imágenes publicadas de la reunión. "Lo vemos como un socio confiable en asuntos de garantizar la seguridad y, por supuesto, promover la paz".
El nuevo gobierno de Israel ya ha demostrado ser un dolor de cabeza para la administración Biden, con el ministro extremista del gabinete Itamar Ben-Gvir visitando el Monte del Templo de Jerusalem y habiendo adoptado medidas punitivas contra los palestinos que se oponen directamente a varios movimientos recientes de Biden para impulsar las relaciones entre Estados Unidos y la Autoridad Palestina. Netanyahu le dijo a Sullivan que las medidas eran una respuesta necesaria a los palestinos que presionan a la Corte Penal Internacional para que condene lo que considera una ocupación israelí de territorio de Cisjordania.
Sullivan le señaló a Netanyahu que el "compromiso de Biden con el Estado de Israel es profundo", un "compromiso que está arraigado en la historia, los intereses y los valores compartidos".
Estados Unidos ha dicho que se comprometerá con el gobierno de Netanyahu en función de sus políticas y no de sus personalidades, incluidos altos ministros del gabinete que en el pasado han expresado vehementes puntos de vista antipalestinos y antiárabes.
Funcionarios estadounidenses han expresado previamente su preocupación por al menos dos políticos israelíes de extrema derecha, Itamar Ben-Gvir y Bezalel Smotrich.
Ben-Gvir, un legislador conocido por su vitriolo antiárabe y sus acrobacias provocativas, es el ministro de Seguridad Nacional, una posición poderosa que lo pone a cargo de la fuerza policial de Israel. Mientras tanto, Smotrich, líder del partido Sionismo Religioso, que comparte puntos de vista antipalestinos y antigay, ha recibido la supervisión del organismo de defensa israelí a cargo de los asuntos civiles palestinos.
El gobierno israelí también es una complicación no deseada para un equipo de seguridad nacional de Biden que busca desviar la atención de Medio Oriente hacia rivales como China y Rusia. También se produce cuando los republicanos toman el control de la Cámara de Representantes y están ansiosos por presentar a Biden como hostil a Israel antes de las elecciones presidenciales de 2024.
Sullivan también se reunió con altos funcionarios de seguridad israelíes, incluido el jefe del Mossad. Se reunió, además, con el presidente ceremonial del país, Isaac Herzog, el miércoles.
