Los cohetes lanzados desde el Líbano el lunes por la noche activaron las sirenas en Haifa y Carmel Ridge. Las imágenes de los medios israelíes mostraron alrededor de 10 intercepciones. Esta es la primera gran andanada de cohetes disparada desde el Líbano hacia la tercera ciudad más grande de Israel desde la Segunda Guerra del Líbano en 2006.
Anteriormente, los cohetes procedentes del Líbano también hicieron sonar las sirenas en el norte de Cisjordania por primera vez, llegando hasta 60 millas al sur de la frontera, similar a la distancia hasta el área de Tel Aviv.
Además, en más de una hora, se dispararon aproximadamente 130 cohetes desde el Líbano contra varias regiones del norte de Israel, lo que hizo saltar las alarmas en las zonas de Carmel Ridge y Haifa Bay, una de las zonas urbanas más densamente pobladas de Israel, así como en Acre, la Baja Galilea, el valle de Jezreel, Safed, los Altos del Golán y otras regiones.
Las FDI confirmaron que alrededor de 10 cohetes fueron disparados desde el Líbano hacia el norte de Israel en el primer bombardeo, lo que provocó alertas en la región de Carmel, Alta Galilea y el valle de Jezreel. Los sistemas de defensa aérea israelíes interceptaron varios cohetes, mientras que otros cayeron en zonas despobladas.
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Las defensas aéreas interceptan cohetes de Hezbolá sobre la bahía de Haifa.
(Carmit Ben Simon)
Sirenas adicionales sonaron en el centro y la baja Galilea a las 4:24 p.m., mientras se lanzaban otros 25 cohetes desde el Líbano. Algunos fueron interceptados, mientras que otros también aterrizaron en campo abierto.
Un interceptor impactó en un lugar de la ciudad de Basmat Tab'un, cerca de Shefa-'Amr, sin causar heridos. Un incendio, probablemente causado por los escombros de un interceptor, estalló en un campo cerca de Tishbi Junction en el valle de Jezreel, donde dos equipos de extinción de incendios están trabajando para controlar las llamas. Posteriormente, se lanzaron unos 25 cohetes más hacia los Altos del Golán, algunos de los cuales cayeron en zonas despobladas.
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Las defensas aéreas interceptan cohetes de Hezbolá sobre la bahía de Haifa.
(Shalom Shaiovich)
No hubo reportes inmediatos de daños o víctimas
Mientras tanto, las FDI dijeron que llevaron a cabo un asalto aéreo a gran escala contra más de 800 posiciones de Hezbolá en el sur del Líbano y el valle de Bekaa. Los ataques, basados en inteligencia precisa, tuvieron como objetivo edificios donde Hezbollah almacenaba cohetes, misiles, lanzadores, drones y otras municiones. El jefe del Estado Mayor de las FDI, teniente general Herzi Halevi, y el comandante de la Fuerza Aérea, mayor general Tomer Bar, supervisaron la operación desde el centro de comando en Tel Aviv.
Anteriormente, el Ministerio de Salud libanés informó que el número de muertos por los ataques aéreos israelíes en el sur del Líbano había aumentado a 182. Se ha informado de que otras 727 personas han resultado heridas a medida que se intensifican las hostilidades en la región.
Más tarde, la red libanesa Al Mayadeen, afiliada a Hezbolá, informó que las muertes en los ataques aéreos israelíes desde el lunes por la mañana habían aumentado a 274 y los heridos a 1.024.
El ministro de Defensa, Yoav Gallant, junto con el primer ministro Netanyahu, recibieron una sesión informativa sobre la ampliación de los ataques contra objetivos de Hezbolá en el centro de mando de la Fuerza Aérea. El cierre del espacio aéreo desde Hadera hacia el norte se ha prorrogado hasta finales de septiembre debido a la escalada del conflicto. Hasta el momento, no hay actualizaciones sobre las operaciones en el aeropuerto Ben Gurion.
Anteriormente, Netanyahu advirtió al público el lunes que Israel estaba "enfrentando días complejos por delante" a medida que los combates con Hezbolá en el norte alcanzan un punto álgido.
"Quienquiera que intente dañarnos, lo golpearemos aún más fuerte", dijo Netanyahu en una evaluación de seguridad en el centro de comando de la Fuerza Aérea israelí en la sede del Ministerio de Defensa en Tel Aviv junto a Galant, Halevi y el comandante de la Fuerza Aérea, Bar. "Prometí que cambiaríamos el equilibrio de seguridad en el norte, y eso es exactamente lo que estamos haciendo. Nos esperan días complejos", agregó el primer ministro.