El establecimiento de seguridad esperó mucho tiempo el momento en que surgiera una indicación con respecto a Muhamad Sinwar, quien se define como un as en términos de objetivos de asesinato. El personal del Shin Bet, junto con la Inteligencia Militar, trabajó arduamente para traer la indicación de inteligencia del paradero de Sinwar, y cuando llegó todo el sistema comenzó a actuar rápidamente para eliminarlo. Horas más tarde, las FDI publicaron imágenes de fotografías aéreas de la escena del ataque en Khan Younis, antes y después de los bombardeos de la Fuerza Aérea.
Paralelamente a los preparativos, se llevaron a cabo todas las comprobaciones posibles para asegurarse de que no había rehenes en el túnel en el que fue encontrado. En el intento de asesinar a Muhamad Sinwar, los aviones de combate de la Fuerza Aérea israelí lanzaron unas 40 bombas antibúnkeres, con un peso total de alrededor de una tonelada, similar al asesinato del secretario general de Hezbolá, Hassan Nasrallah, que se encontraba en un búnker subterráneo en ese momento.
Sinwar era un objetivo que estaba siendo monitoreado constantemente. Una fuente de seguridad explicó que sólo una hora antes del ataque en Khan Younis fue aprobado por el jefe del Estado Mayor de las FDI, el teniente general Eyal Zamir, y el jefe del Shin Bet, Ronen Bar, y más tarde por el primer ministro Benjamin Netanyahu y el ministro de Defensa Yisrael Katz.
Como parte del esfuerzo bélico, el Shin Bet y la Inteligencia Militar están trabajando para extraer muchos detalles de la Franja de Gaza y crear una amplia infraestructura de inteligencia. En algunos casos, la recopilación de inteligencia se llevó a cabo con riesgo real para la vida. La capacidad de determinar con un alto porcentaje de certeza que Sinwar estaba efectivamente en el túnel, y por otro lado, que no había rehenes con él que puedan ser dañados, da fe de la profundidad de inteligencia que el Shin Bet construye en la Franja de Gaza durante los meses de la guerra.
Según informes palestinos, la Fuerza Aérea israelí continuó atacando el complejo aun después del ataque inicial, e incluso atacó a cualquiera que se acercara al complejo, por temor a querer ayudar a los que de alguna manera lograron escapar. "Quienquiera que estuviera allí murió, no hay forma de salir", dijo una fuente de seguridad. De hecho, los que no murieron a causa del ataque fueron asfixiados por los gases tóxicos. "Es demasiado pronto para conocer los resultados del ataque, también a la luz del hecho de que el lugar que fue atacado estaba bajo tierra. Pero ciertamente si tiene éxito, será un logro frente a Hamás en términos de estrategia y moral, y ciertamente en términos del contexto de las negociaciones", agregó una fuente familiarizada con los detalles.
Otra fuente le dijo a Ynet anoche que Israel no había informado a los Estados Unidos antes del intento de asesinato. Explicó que fue el resultado de una "oportunidad explosiva" y, por lo tanto, dijo, no había tiempo para actualizar a los estadounidenses, o para tener en cuenta que el ataque se llevó a cabo mientras el presidente Trump hablaba en Arabia Saudita.
La fuente aclaró que no hay certeza de que Sinwar haya sido asesinado, pero señaló que "por el momento no se ve mal, y si estuvo allí es difícil creer que sobrevivió, porque éste es un ataque muy agresivo". La decisión de asesinar a Muhamad Sinwar se tomó poco tiempo antes, y los aviones despegaron en un plazo ajustado y rápido. Israel estima que tomará tiempo para que los resultados del ataque se aclaren con certeza, posiblemente unos pocos días.
Sinwar ha comandado el ala militar de Hamás, las Brigadas Izz ad-Din al-Qassam, en la Franja de Gaza desde el asesinato de Mohammed Deif. Después del asesinato de su hermano Yahya Sinwar en Rafah, también participó en la gestión de otros asuntos en la Franja de Gaza. Es considerado un extremista y una figura central en el liderazgo de Hamás. Muhammad Sinwar ha sido a menudo un obstáculo en todos los asuntos relacionados con las negociaciones entre Israel y Hamas, y si es eliminado tendrá implicaciones para las negociaciones para un acuerdo.
El papel de Muhamad Sinwar fue revelado por primera vez por Hamás en 2005. La organización rompió toda su tradición de secretismo, revelando las identidades de siete de sus comandantes en la Franja de Gaza que dirigieron ataques contra israelíes y las FDI. Ya en 2005, según la publicación de Hamás de la época, Israel intentó asesinarlo tres veces: disparandole con francotiradores; bombardeando su casa con dos misiles de un cuarto de tonelada; y colocando un artefacto explosivo en la pared de su casa en Khan Younis.
Una de las principales operaciones firmadas por Muhamad Sinwar fue el secuestro del soldado Gilad Shalit, y los esfuerzos en el acuerdo para su liberación, en el que su hermano Yahya, que más tarde se convirtió en el líder de Hamás, fue liberado de prisión hasta su asesinato. El día del secuestro, en junio de 2006, Sinwar se desempeñaba como comandante de la Brigada Khan Yunis y, a lo largo de los años, condicionó la liberación de Shalit a la liberación de su hermano.
Israel ha intentado asesinar a Muhamad Sinwar en repetidas ocasiones a lo largo de los años. En 2012, durante la Operación Pilar de Defensa, su casa fue bombardeada, y en 2014, durante la Operación Margen Protector, pero él no estaba allí. En medio de esa operación, circularon fotos e informes de que Sinwar había sido asesinado. Las publicaciones, encabezadas por una página de Facebook que no recibió mucha atención, iban acompañadas de una foto en la que parecía estar presuntamente muerto. Desde entonces hasta mayo de 2022, el nombre de Muhamad Sinwar apenas salió a relucir, y Al-Jazeera llegó a afirmar que no asistió al funeral de su padre, en enero de 2022. En algunas redes árabes, se le describió como "el que vuelve de entre los muertos".
