Cualquiera que haya visitado el túnel de Hamas en Khan Younis expuesto por las unidades de fuerzas especiales de las FDI hace más de una semana sabrá que Yahya Sinwar y otros miembros de alto rango del liderazgo de Hamas están corriendo bajo tierra para salvar sus vidas. Los hallazgos en el túnel también indican claramente que algunos de los cautivos israelíes están con ellos y que los terroristas los obligaron a trasladarse de un complejo subterráneo a otro junto.
En los dos complejos de trabajo a los que conducía el túnel, las FDI encontraron pertenencias personales, ropa, armas, explosivos y millones de dólares y shekels, así como documentos que detallaban las cantidades de dinero que Irán transfirió a Hamás en Gaza. Algunos de ellos estaban dirigidos directamente a Sinwar.
Sin lugar a dudas, los que se quedaron en estos recintos se habrían llevado el dinero y destruido los documentos, a menos que se vieran obligados a irse rápidamente una vez que escucharon que se acercaban las fuerzas de las FDI y las excavadoras D9.
Un portavoz de la Unidad de Tzáhal publicó el jueves fotos de una de las instalaciones en el túnel que, según todos los indicios, estuvo habitado por rehenes israelíes, al menos uno de los cuales resultó herido. En la habitación había una cama individual con un tanque de oxígeno comúnmente utilizado para tratar a los pacientes, y los materiales de vendaje estaban esparcidos en la habitación adyacente.
En esta cámara estrecha y alargada, también había colchones en los que probablemente dormían los rehenes sanos. Los terroristas, en su huida, se llevaron a los cautivos con ellos, pero dejaron atrás los tanques de oxígeno.
Una fuente confiable que vio el túnel y sus instalaciones mencionó que, en paralelo al túnel principal, había un túnel adicional con un baño y una ducha en su extremo y, a través de él, el aire entraba en la habitación de los prisioneros. Según la misma fuente, el aire en el túnel era caliente y sofocante incluso cuando afuera hacía frío.
Los soldados de la unidad de fuerzas especiales que tomó el control del túnel creen que los terroristas fueron sorprendidos por la gran cantidad de rehenes que habían capturado. Por lo tanto, tuvieron que convertir una oficina en la instalación subterránea en una sala de prisión. Se instalaron barras de hierro en el estrecho espacio y se cubrieron con telas gruesas.
Se ha desarrollado toda una industria en torno a los túneles y al "sistema de metro militar" de Hamás en la zona, desde muros de hormigón, pasando por grandes plataformas de perforación de acero conectadas a motores eléctricos, hasta pequeños coches eléctricos que se asemejan a los carritos de golf en los que altos funcionarios de Hamás recorren los muchos kilómetros de túneles.
Desde el descubrimiento de este túnel hace diez días, las FDI han descubierto y explorado tres lugares más donde Sinwar se habría alojado en el área de Khan Younis, y de los que probablemente tuvo que huir. Con cada día que pasa, las señales indican que la función de Sinwar como líder está disminuyendo.
Esto es probablemente lo que quiso decir el ministro de Defensa, Yoav Gallant, cuando dijo en una conferencia de prensa el lunes que Sinwar está "huyendo, moviéndose de escondite en escondite e incapaz de comunicarse con sus fuerzas".
Los medios de comunicación árabes informan que los líderes de Hamás en Doha, Catar, les dicen a sus anfitriones y a los egipcios que están teniendo dificultades para comunicarse con Sinwar y resolver sus desacuerdos, que es una de las razones del retraso en la respuesta de la organización terrorista al acuerdo de liberación de rehenes redactado en París.
Es difícil determinar si los problemas de comunicación de los líderes con Sinwar son una táctica destinada a desgastar a los israelíes y a los intermediarios, o si realmente está luchando por llevar a cabo una comunicación clandestina debido a su necesidad de cambiar de escondite con frecuencia.
En cualquier caso, los oficiales de inteligencia militar israelíes no atribuyen importancia a los desacuerdos entre Sinwar y los líderes de Hamás en el extranjero. Si bien figuras como Ismail Haniyeh, Khaled Mashal, Musa Abu Marzook, Osama Hamdan y otros son miembros influyentes del liderazgo del grupo terrorista, permanecen en Catar o en el Líbano.
Sinwar, por otro lado, está dentro de la Franja con Mohammed Deif y otros altos comandantes de Hamas sirviendo en su ala militar, y también tiene a la mayoría de los rehenes israelíes. Por lo tanto, él es el único que puede decidir actualmente qué pasará con los cautivos, y su conducta determinará cuándo y cómo terminarán los combates en la Franja de Gaza.
500 presos palestinos condenados a cadena perpetua
En estos días se están llevando a cabo tres procesos críticos: la negociación para la liberación de los cautivos, la persecución de Sinwar y sus asociados, y los preparativos de las FDI para la posibilidad de una operación en Rafah. El problema es que estos problemas no actúan en el mismo período de tiempo.
El reto al que se enfrentan los responsables de la toma de decisiones en Israel es sincronizar estas operaciones a través de un acuerdo de varias fases, en el que todos los rehenes serán liberados a cambio de largos períodos de pausa en los combates, y más tarde, el liderazgo de Hamás será retirado de su control de la Franja a través de su deportación u otro arreglo.
Incluso si los mediadores no logran llegar a un acuerdo importante, existe la posibilidad de que persuadan a las partes para que acepten lo que se llama la "etapa humanitaria", en la que las mujeres, los niños, los enfermos y los ancianos serán liberados y, a cambio, Israel cederá a algunas de las demandas de Hamas.
En tal caso, se acordará que las cuestiones pendientes relativas a las exigencias de Hamás y a la liberación de los rehenes restantes se tratarán en una fecha posterior, durante las pausas en los combates.
Si los mediadores no logran que las partes lleguen a un acuerdo, solo se puede esperar que la presión militar y diplomática finalmente obligue a Sinwar a aceptar un acuerdo.
Una operación terrestre de las FDI en Rafah y el establecimiento de mecanismos para el gobierno civil y la distribución de ayuda humanitaria en la Franja pueden dejar claro a Sinwar que no tiene otro lugar donde escapar con los rehenes y que sus posibilidades de mantener a Hamás como una fuerza política y militar en Gaza son nulas. lo que lo obligaría a transigir. El gobierno de Israel también puede reconsiderar y aceptar los términos que actualmente rechaza.
El reto de Sinwar es utilizar a los rehenes, la única carta que le queda en la mano, para permitir la supervivencia de Hamás en la Franja bajo su liderazgo. Inicialmente en la clandestinidad y luego, a lo largo de los años, de vuelta a la superficie, ya sea como entidad política, como parte de un gobierno civil palestino en la Franja, o como una milicia terrorista armada como Hezbolá en el Líbano.
Los líderes políticos de Hamas en el extranjero ya han comenzado a mantener conversaciones con la Autoridad Palestina, asumiendo que Israel se verá obligado a aceptar la demanda de Washington de que el organismo administre los asuntos de Gaza después de la guerra.
Meir Ben-Shabbat, que encabezó el Comando Sur del Shin Bet y fue presidente del Consejo de Seguridad Nacional (NSC) de Israel, conoce personalmente a Sinwar. Según él, el legado del líder y el espíritu que dejará atrás son más importantes para Sinwar que su propia vida. Por lo tanto, no renunciará a sus demandas centrales: detener los combates y la retirada de las FDI de Gaza, la liberación de numerosos prisioneros palestinos y las demandas relacionadas con los arreglos de oración y la presencia en el Monte del Templo.
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Para Sinwar, su legado es más importante que su propia vida. No se espera que sea flexible a un pronto acuerdo.
( AP)
Estas exigencias se reflejan en la letra pequeña de la respuesta de Hamás al nuevo acuerdo de liberación de rehenes presentado por los mediadores. Por ejemplo, Hamás exige que Israel libere a 1.500 prisioneros palestinos, incluidos asesinos, en la primera etapa del acuerdo, junto con la liberación de mujeres, enfermos y jóvenes palestinos.
Hamás exige que esta liberación masiva, que incluye a unos 500 prisioneros condenados a cadena perpetua, se lleve a cabo en la etapa humanitaria, que también incluye un alto el fuego de 45 días y la liberación de 35 rehenes israelíes: mujeres, niños, enfermos y ancianos. En otras palabras, ésta es sólo la primera etapa de la liberación de los prisioneros palestinos.
Otras demandas incluidas en la respuesta de Hamás son la mejora de las condiciones de los prisioneros palestinos que permanecerán en las prisiones israelíes, la revocación de los arreglos para las visitas judías al Monte del Templo y las restricciones a la oración musulmana en las mezquitas locales. Hamás exige que se vuelva al statu quo que prevalecía en el Monte del Templo en 2002, antes de la Operación Escudo Defensivo.
Los soldados de las FDI serán devueltos en la segunda etapa del acuerdo, que también durará 45 días, durante los cuales se alcanzarán acuerdos para otro alto el fuego y la retirada de los militares de Gaza. Sólo en la tercera etapa, después de que Israel cumpla la mayoría de sus compromisos, Hamás entregará los cuerpos de los israelíes que fueron asesinados en Gaza.
Los soldados de las FDI serán devueltos en la segunda etapa del acuerdo, que también durará 45 días, durante los cuales se alcanzarán acuerdos para otro alto el fuego y la retirada de los militares de Gaza.
Las reacciones del Gabinete de Guerra a la respuesta de Hamás variaron desde opiniones de que la respuesta era una artimaña para hacer que Israel la rechazara hasta aquellos que creían que se podrían llevar a cabo más negociaciones después de la propuesta. Los funcionarios de seguridad se negaron a responder al documento, pero creen que la presión militar puede cambiar la postura de Sinwar.
Todos los altos funcionarios de seguridad con los que me he reunido en los últimos diez días creen que las FDI y el Shin Bet capturarán pronto a Sinwar. "Lo traeremos, y tomará mucho menos que los diez años que les tomó a los estadounidenses atrapar a Bin Laden", dijo un funcionario de inteligencia de alto rango. La segunda cuestión en la que coinciden los funcionarios es que el componente religioso es un componente importante, si no el más crítico, en la personalidad y la conducta de Sinwar.
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Soldados de las FDI patrullan Khan Younis. Diversas fuentes creen que pronto capturarán a Yahya Sinwar.
(FDI)
La tercera cuestión se refiere a Rafah. "Si no lo atrapamos primero, estará en serios problemas cuando lleguemos a Rafah", me dijo un oficial de alto rango de las FDI. Según él, Rafah es el único lugar de la Franja donde las instalaciones militares de Hamás siguen funcionando.
Según los medios egipcios, hay unos 12 túneles terroristas activos debajo del Corredor de Filadelfia. Así que Sinwar puede escapar a través de los túneles de Khan Younis a Rafah y más allá, al Sinaí, y de allí salir del país a través del Mar Rojo a un país que le conceda asilo, como Yemen. Incluso es posible que ahora ya esté en Rafah con los rehenes, que le sirven de escudos humanos.
Mientras el Cuerpo Blindado de las FDI no comience a operar en Rafah, Sinwar sentirá que tiene un respiro político y una ruta de escape, y tratará de detenerse en el tiempo creyendo que Egipto, Estados Unidos y la ONU impedirán que las FDI entren en la ciudad llena de refugiados.
En Israel, se están haciendo esfuerzos para obtener el consentimiento de Egipto a fin de impedir que se rompa la valla fronteriza y se intente escapar de las masas palestinas al Sinaí en caso de que las FDI ataquen a los batallones de Hamás y de la Jihad Islámica en Rafah.
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Rafah. La ciudad fronteriza egipcia está poblada de refugiados palestinos y es el único lugar donde Hamás sigue totalmente activo.
(AFP)
Los cinco escenarios para enfrentar a Sinwar
Hay cinco escenarios posibles en caso de que las FDI logren localizar a Sinwar pero se abstengan de matarlo por temor a dañar a los rehenes.
Un escenario es que Sinwar acepte la propuesta israelí-estadounidense que le permita salir de Gaza y exiliarse. Exigirá para ello que Israel no lo elimine en el extranjero, liberando a cambio a los rehenes israelíes y a los cuerpos retenidos por Hamas.
Según todos los expertos, la probabilidad de que Sinwar acepte exiliarse es inexistente. Los mismos expertos también creen que Sinwar no huirá de Gaza por su propia voluntad, ya que sería visto como una vergüenza y una traición al espíritu en el que cree. Preferiría morir "como un shahid".
En el segundo escenario, Sinwar se entregará y liberará a los rehenes a cambio de una amplia liberación de prisioneros palestinos y garantías de que Israel no lo eliminará en prisión. Esto le dará la oportunidad de regresar a la política en un momento posterior.
Sinwar ve cómo Marwan Barghouti, que está encarcelado en Israel, es mencionado con frecuencia como el heredero del presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, al frente del Fatah y la Autoridad Palestina.
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Marwan Barghouti, alto miembro de Fatah que se encuentra detenido en Israel, mencionado como sucesor de Mahmoud Abbas en la Autoridad Palestina.
(AP)
Si su plan tiene éxito, dice un funcionario de inteligencia, el propio Sinwar podría algún día ser liberado en un acuerdo de rehenes y volver a liderar Hamás. Ben-Shabat descarta la posibilidad de que Sinwar se rinda y regrese a una prisión israelí.
En el tercer escenario, Sinwar se suicidará para evitar ser capturado por las FDI. En tal caso, la vida de los rehenes cercanos a su lado podría estar en peligro. Sinwar es un hombre despiadado decidido a dañar a los israelíes. Pero también es posible que los terroristas que custodian a los cautivos prefieran salvar sus propias vidas y no hacerles daño. Las FDI se niegan a evaluar la probabilidad de tal escenario.
En el cuarto escenario, las FDI eliminarán o capturarán a Sinwar antes de que tenga la oportunidad de ordenar dañar a los cautivos. La probabilidad de que una operación de este tipo se lleve a cabo y tenga éxito no es alta, pero existe.
Es probable que el jefe del Estado Mayor de las FDI, el ministro de Defensa y el Gabinete de Guerra de Israel no aprueben tal operación a menos que estén convencidos de que se llevará a cabo con éxito.
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Para aprobar una operación de captura, el gabinete de guerra debe evaluar todos los riesgos y el peligro a que se expone a los rehenes.
(Haim Tzach Laam)
Otro escenario posible es que los soldados de la unidad de fuerzas especiales de las FDI se encuentren con Sinwar y sus hombres bajo tierra y se enfrenten, en lo que Sinwar y algunos terroristas que lo acompañan serían eliminados, pero los rehenes también resultarían dañados.
Israel cree que Sinwar y los líderes de Hamás en Gaza y en el extranjero desean un acuerdo, y aceptarán un acuerdo parcial en caso de que fracasen las negociaciones, en el que la primera etapa de liberación de rehenes se llevaría a cabo a cambio de la liberación de prisioneros palestinos de alto perfil y otras demandas.
A continuación, se tendrá que celebrar una ronda separada de negociaciones sobre la liberación de los soldados de las FDI cautivos, que son el as de Sinwar en la guerra en curso en Gaza.
