El gobierno israelí aprobó la adquisición de dos lanchas de desembarco naval de fabricación estadounidense, según revelaron las autoridades, añadiendo que se espera que la compra tenga lugar en los próximos meses.
Aunque Israel no compra este tipo de embarcación desde 1993 debido a la falta de amenazas marítimas considerables en la región, la continua expansión de Hezbollah en Líbano -con el que el Estado judío comparte una frontera marítima disputada- cambió las consideraciones de seguridad del país, explicó el corresponsal de i24NEWS, Ariel Levin Waldman.
"Israel está mirando hacia el norte y dice que Hezbollah está ganando poder, que son un apoderado de Irán y que está llegando rápidamente el momento en que una confrontación con Irán podría estar en la agenda", explicó Waldman, añadiendo que la forma más rápida de detener un posible ataque iraní es golpear Beirut.
En la actualidad, Jerusalem sólo cuenta con siete corbetas y ocho barcos de misiles diseñados para interceptar las amenazas que llegan a Israel, pero no tiene la capacidad de proyectar fuerza, según Waldman.
Se espera que los buques construidos en Estados Unidos se unan a una nueva escuadra en la base naval de Ashdod dentro de unos meses.
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Las fuerzas de paz de la ONU patrullan la carretera de la costa cerca de Naqura, la última ciudad del Líbano antes de la frontera con Israel.
(AFP)
Las lanchas de desembarco son embarcaciones de tamaño pequeño a mediano que se utilizaron en gran medida durante la Segunda Guerra Mundial.
Están diseñadas para transportar soldados, equipos, vehículos y suministros del mar a la costa durante las operaciones militares ofensivas. Dichas embarcaciones pueden transportar unos 200 hombres y hasta 75 toneladas de carga, y también pueden utilizarse para incursiones en territorio enemigo.
