La Autoridad Palestina y sus dos principales partidos políticos, Fatah y Hamás, repudiaron el acuerdo anunciado entre el Likud de Netanyahu y el parlamentario de extrema derecha Itamar Ben Gvir; y reclamaron la intervención de Estados Unidos y organismos internacionales.
Según informó el Likud en la noche del miércoles tras una reunión entre Netanyahu y Ben Gvir, en el acuerdo de coalición del próximo gobierno se impulsarán políticas y modificaciones legales para regularizar la situación de una serie de asentamientos israelíes en Cisjordania.
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El Likud informó que Netanyahu y Ben Gvir acordaron impulsar políticas a favor de los asentamientos israelíes en Cisjordania.
(Ynet)
Nabil Abu Rudeina, vocero del presidente palestino Mahmoud Abbas, afirmó que “el acuerdo entre Ben Gvir y Netanyahu contradice todas las decisiones internacionales y el derecho internacional, destruye las posibilidades de establecer un estado palestino, profundiza la construcción de asentamientos y conduce a la toma de posesión de más tierras palestinas”.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de la Autoridad Palestina, citado por la agencia de noticias Wafa, hizo un llamado a la comunidad internacional y al gobierno de Estado Unidos para que “tome las medidas necesarias” para presionar por un acuerdo que “profundizará y extenderá los asentamientos en tierras palestinas”. Un comunicado de la cancillería palestina advierte que el acuerdo “dificultará cualquier negociación futura y socavará todo esfuerzo internacional para generar confianza entre el lado palestino y el lado israelí”.
Desde el partido palestino Fatah, al que pertenece Abbas, remarcaron que “el acuerdo entre Netanyahu y Ben Gvir anuncia una nueva etapa del difícil conflicto con Israel” y exige una reacción internacional: “La ONU está obligada a traducir en acciones sus decisiones sobre la cuestión palestina, especialmente en lo que respecta a asentamientos”.
Hazim Qazem, vocero de Hamás, organización terrorista que gobierna en la Franja de Gaza, advirtió que “el pueblo palestino continuará su lucha legítima contra la ocupación sionista y sus políticas racistas” y remarcó que “la lucha nacional no se detendrá, independientemente de cómo esté compuesto el gobierno de ocupación”.