El primer ministro Naftalí Bennett prometió el domingo intensificar la batalla contra la ola de crímenes que asola al sector árabe del país y dijo a sus ministros: "Estamos perdiendo el país".
Las declaraciones de Bennett tuvieron lugar durante la reunión semanal de gabinete y el primer ministro agregó que los ministros del gobierno tienen "pleno apoyo" en la lucha contra el crimen violento en las comunidades árabes israelíes.
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El primer ministro Naftalí Bennett durante la reunión semanal de gabinete el domingo.
(Alex Kolomoisky)
Durante la reunión el gobierno votó y aprobó una enmienda a la ley, presentada por el ministro de Justicia, Gideon Saar, para otorgar a la policía mayor autoridad para registrar casas privadas sin una orden judicial.
"Los tiempos inusuales requieren medidas inusuales"
Gideon Saar, ministro de Justicia
Si el Parlamento vota a favor de la medida, la enmienda tendrá una vigencia de entre tres y cuatro años. La enmienda se propuso a raíz de estadísticas que muestran que el 80% de los casos de asesinato en el sector árabe siguen sin resolverse.
El ministro de Defensa, Benny Gantz, dijo durante la reunión que su voto era a favor, pero advirtió que la policía no se extralimitara en su autoridad. Por su parte, la ministra de Medio Ambiente, Tamar Zandberg, del partido de izquierda Meretz, sostuvo que la norma no está en consonancia con una democracia. Saar, por su parte, respondió que "los tiempos inusuales requieren medidas inusuales".
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La policía detiene a un sospechoso durante una redada contra bandas criminales árabes en agosto.
(Portavoz de la policía)
Por su parte, el ministro de Cooperación Regional Issawi Frej, también de Meretz, dijo que no se opondría ni al ingreso de la CIA con tal de que la población árabe pueda recuperar la sensación de seguridad.
Desde principios de año, más de 100 ciudadanos árabes murieron en hechos criminales violentos, 30 de ellos desde que la policía estableció un grupo de trabajo especial para hacer frente a la crisis.
"La policía debe recibir las mejores herramientas posibles para tener éxito en su misión de poner fin a la violencia. El derecho a la vida también es un derecho humano”, dijo Saar.
La enmienda sugerida otorgaría a la policía la autoridad para registrar en cualquier lugar y en cualquier momento que exista una causa probable de delito grave, incluida la extorsión y el uso de armas ilegales, y cuando exista la preocupación por la destrucción de pruebas o que un sospechoso esté siendo protegido del alcance de la ley.
