El Ministerio de Defensa convocó un concurso para comprar armas que sean de producción nacional: 20.000 de ellas serían las M4A1, pertenecientes a la familia M16, con opción de compra de otras 20.000, según reveló Ynet.
Esta licitación no tiene precedentes, ya que exige que el 51% de las piezas de las armas sean de fabricación local y que el montaje se realice internamente.
Hasta ahora, las FDI adquirieron fusiles M16 de EE.UU. con fondos de ayuda. El precio de estas armas se estima entre 4.000 y 5.000 shekels por unidad. El coste también será un factor importante a la hora de determinar el ganador de la licitación.
Las armas de fabricación israelí, además, se fabricaron parcialmente con piezas importadas del extranjero. Hasta ahora, el Ministerio de Defensa no había limitado a los fabricantes locales el número de piezas de origen nacional del total de componentes del arma.
En la licitación actual, el ganador también deberá garantizar que las piezas importadas no requieren una licencia de exportación del país de origen, con el objetivo de evitar situaciones como las que se viven actualmente con países como Canadá, que se niegan a enviar armas o equipos militares, drones, etc., a Israel debido a sus operaciones en Gaza.
Según una fuente del sector, "las FDI quieren asegurarse de no quedarse tiradas porque un país decida no enviarnos un tornillo, además de su deseo de animar a la industria local a ampliar su capacidad de producción".
Otro requisito de la licitación: experiencia demostrada en la fabricación de armas y la venta de al menos 1.000 armas de fuego de la familia M16 a cuerpos de seguridad reconocidos.
Tres empresas israelíes cumplen estos criterios: EMTAN Karmiel, IWI y Silver Shadow.
Las armas de fuego ofertadas en la licitación se someterán a un proceso de aprobación de modelos y verificación del cumplimiento de los requisitos, tras lo cual se seleccionará a dos ganadores. Los proveedores deberán producir 2.500 armas de fuego cada mes hasta completar el suministro.
La última vez que el Ministerio de Defensa compró armas similares fue luego del estallido de la guerra, cuando se adquirieron 9.000 fusiles Tavor a EMTAN Karmiel e IWI.
Esto se produjo después de que Israel se enfrentara a escasez y dificultades para adquirir equipos y armas de fabricantes internacionales incluso antes de la guerra de Gaza, debido a las enormes demandas en medio de la carrera armamentística occidental desde la invasión rusa de Ucrania.