La ascensión del ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, al Monte del Templo este martes causó una gran tormenta política, pero también llevó a la Policía de Israel a estar en alerta máxima. Tan pronto como salió del complejo del Monte del Templo esta mañana, la policía emitió una directiva para "prepararse inmediatamente" para el alistamiento de las compañías de reserva de la Policía Fronteriza por temor a un estallido.
Esa tensión se sintió cuando en la Ciudad Vieja de Jerusalem se desató una pelea entre los judíos que fueron a rezar a las puertas del Monte del Templo y los árabes que pasaban por allí. La policía trató de separarlos, pero fueron golpeados por piedras arrojadas contra ellos. Varias personas fueron detenidas para ser interrogadas por ambas partes.
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Ben-Gvir en el Monte del Templo. Al lado, uno de los detenidos durante los disturbios.
(Ynet)
Además de Jerusalem, la policía también está desplegando grandes fuerzas en todo el país, particularmente en las ciudades mixtas. Como parte de las lecciones aprendidas por la Operación Guardián de los Muros, se decidió crear una respuesta poderosa con gran fuerza ante cualquier perturbación de la paz y acabar con ella incluso antes de que se pierda el control, como se vio en las ciudades mixtas en aquella época.
La policía se encuentra en una posición problemática, ya que en este momento están caminando por la cuerda floja frente al ministro a cargo de la fuerza, quien también exigió y recibió poderes de gran alcance sobre ese cuerpo de seguridad. Por lo tanto, no podía expresar objeciones profesionales a los planes de Ben-Gvir de ascender al Monte del Templo, y el comisionado Yaakov Shabtai, así como el comandante del Distrito de Jerusalem, el mayor general Doron Turgeman, le informaron desde el primer momento que no se oponían a su decisión.
Anoche, cuando se informó que la visita de Ben-Gvir se había pospuesto para "las próximas semanas", la policía estaba en una audiencia evaluando la situación antes de su visita, que estaba programada para las primeras horas de la mañana. La policía dice que, en lo que a ellos respecta, la visita de Ben-Gvir fue un gran éxito. El ministro de Seguridad Nacional, por su parte, afirma haber logrado transmitir el mensaje de que "nuestro gobierno no cederá ante las amenazas de Hamas".
Para el ministro derechista israelí, "el Monte del Templo es el lugar más importante para el pueblo judío. Nos reservamos la libertad de movimiento de musulmanes y cristianos, pero los judíos también subirán al Monte. Cualquiera que amenace debe ser tratado con puño de hierro".
Mahmoud Abbas apela al Consejo de Seguridad: "Detengan el ataque a al-Aqsa"
Durante el día, varias fuentes en muchos países, especialmente en el mundo árabe, condenaron la decisión de Ben-Gvir de ir al Monte del Templo. Encabezados por Estados Unidos, Jordania, los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita también condenaron la acción. Con algunos de ellos, como Jordania y Emiratos Arabes Unidos, Israel tiene firmados acuerdos de paz.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, también abordó el tema, y según la televisión oficial palestina decidió apelar al Consejo de Seguridad de la ONU para que "detenga el ataque a la mezquita de al-Aqsa". El ministro de Relaciones Exteriores de Jordania, Ayman Safadi, calificó el acto como una "invasión". "Este es un acto provocativo peligroso", señaló. "Condenamos esto y advertimos de las consecuencias de todas las medidas ilegales israelíes que socavan las perspectivas de paz y sólo pueden causar más conflictos y violencia. El statu quo en los lugares sagrados debe ser respetado", añadió.
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Abbas en el Consejo de Seguridad de la ONU, al que apelarán los palestinos para denunciar la actitud de Ben-Gvir.
(AFP)
El secretario general de Hezbolá, Hassan Nasrallah, envió un mensaje al nuevo gobierno: "Conocemos a Netanyahu y lo hemos juzgado en el pasado, pero este gobierno está lleno de extremistas corruptos y locos. No nos asusta. De hecho, este gobierno sólo acelerará el fin de Israel. Dañar los lugares sagrados en suelo palestino no hará estallar la situación con los palestinos, sino que hará estallar toda el área".
Una fuente de la oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu afirmó que la acusación de una violación del statu quo era "infundada": "Como parte del statu quo, los ministros a menudo han subido al Monte del Templo en los últimos años, incluido el ex ministro de Seguridad Pública Gilad Erdan". Según la fuente, "Netanyahu se compromete a mantener estrictamente el statu quo en el Monte del Templo sin cambios, sin rendirse a los dictados de Hamas".
A la sombra de la tormenta que causó la ascensión al Monte del Templo, se pospuso lo que se suponía sería la primera visita al extranjero del primer ministro Benjamin Netanyahu: la visita a los Emiratos Árabes Unidos, que se esperaba que tuviera lugar la próxima semana, se pospuso para otro momento más propicio. Fuentes de la oficina de Netanyahu negaron que hubiera una conexión entre el aplazamiento de la visita y el ascenso de Ben-Gvir al Monte del Templo y el hecho de que los Emiratos Árabes Unidos, uno de los países signatarios de los Acuerdos de Abraham, condenaran "el asalto de Ben Gvir" a la mezquita de al-Aqsa. La oficina afirmó que el aplazamiento de la visita, cuya fecha aún no se ha anunciado oficialmente, se refiere sólo a los preparativos logísticos, y dijo que la aspiración es que la visita tenga lugar este mes.
El Líbano también se unió a la lista de países que condenaron, y el Ministerio de Relaciones Exteriores libanés señaló: "Condenamos la entrada del extremista Ben-Gvir en el territorio de la mezquita de al-Aqsa y pedimos al Consejo de Seguridad de la ONU que actúe y haga lo que sea necesario" para evitar que las relaciones se deterioren aun más. "La ONU debería detener al gobierno israelí y obligarlo a respetar las resoluciones internacionales", añadió.
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"Conozco a Netanyahu, su gobierno no nos asusta", dice Hassan Nasrallah.
(Yoav Dodkevich)
Durante el día, los miembros árabes de la Knesset también se refirieron a la acción realizada por Ben-Gvir y advirtieron al nuevo gobierno de Netanyahu contra el intento de cambiar el statu quo. "Ra'am condena enérgicamente el asalto de uno de los ministros más prominentes del gobierno, el ministro de Seguridad Nacional Itamar Ben-Gvir, a la mezquita. Esta es una seria provocación de los sentimientos de unos dos mil millones de musulmanes que ven la mezquita, al-Aqsa, como un derecho puramente islámico, mientras ignoran por completo todas las tendencias internacionales y niegan irresponsablemente todas las leyes internacionales que consideran la mezquita de al-Aqsa un área ocupada".
"Este ataque se considera un insulto a la tutela hachemita jordana de la mezquita de al-Aqsa y una falta de respeto por la posición jordana que rechaza tales invasiones. Ra'am enfatiza que la bendita Mezquita Al-Aqsa, con toda su área, es un derecho exclusivo de los musulmanes, y sólo de los musulmanes, y rechaza cualquier invasión de extremistas, ya sean invasiones de ministros en el país o posiciones oficiales o de otros grupos extremistas. Ra'am advirtió que esto podría arrastrar al país y a la región a un estado de caos e inestabilidad. Ra'am hace un llamamiento a la sociedad árabe en Israel y Jerusalem para que aumente sus oraciones en la mezquita de al-Aqsa.
Ahmed Tibi, presidente de Ta'al, se dirigió al evento en el pleno de la Knesset y dijo que "la irrupción de Ben Gvir en la mezquita de al-Aqsa no es sólo una provocación, sino de un plan para cambiar el statu quo y permitir la oración judía en la mezquita, que es, por supuesto, un lugar sagrado sólo para musulmanes".
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Los líderes árabes israelíes también criticaron a Ben-Gvir y calificaron su actitud como "ataque y provocación".
(Yoav Dodkevich)
Tibi se refirió a las declaraciones de Ben-Gvir de que no se rendirá a los dictados de Hamas: "Lo escuché cuando se coló allí a las 7 de la mañana, durante 13 minutos, rodeado de cientos de policías con armas, con restricciones de entrada en las puertas, con medidas de seguridad y presencia policial en toda la Ciudad Vieja, porque Ben-Gvir se estaba colando en la mezquita de al-Aqsa. Quien diga que no tiene miedo no se acerca sigilosamente con un arma. Cualquiera que piense que es su hogar no se cuela así".
