“Estoy con suspenso y expectativa, y un optimismo cauteloso”, afirmó Yaffa Issachar, la madre de la joven israelí presa en Rusia, horas antes de la llegada del presidente ruso Vladimir Putin a Israel, con quien se reunirá junto a Benjamín Netanyahu para hablar sobre la liberación de su hija. También participará Teófilo III, patriarca de la Iglesia ortodoxa griega.
“Pido apoyar al Primer Ministro y al jefe del Consejo Nacional de Seguridad, y espero buenas noticias para mañana a la mañana”, agregó.
Putin aterrizará el jueves por la mañana para una breve visita por el 75° aniversario de la liberación del campo de exterminio de Auschwitz. Este miércoles, Yuri Ushakov, asesor de política exterior del Kremlin, afirmó que el mandatario ruso hablaría con Yaffa por la liberación de su hija: “Netanyahu pidió varias veces que la liberara, el presidente Rivlin envió una carta. Los aspectos humanitarios se discutirán en la reunión”.
El uso del término “aspectos humanitarios” se eligió cuidadosamente para preparar el terreno para la liberación de Naama y explicar cómo Putin, en el indulto, pasa por alto el sistema judicial ruso que pretende ser independiente y solo recientemente rechazó la apelación presentada por Naama.
Aunque no existe una negociación oficial entre ambos países en torno a la liberación de la joven de 27 años, quien cumple una condena de siete años y medio de prisión por tener 9,5 gramos de cannabis, el Kremlin espera una serie de "gestos" relacionados con los intereses, sitios y activos rusos en Israel.
Está previsto que Putin aterrice el jueves a las 08:30 a.m. en el aeropuerto Ben Gurion, y desde allí vaya directamente a la residencia del primer ministro en Jerusalem. Asimismo, será la primera personalidad en encontrarse con Netanyahu, luego de que el ministro de Relaciones Exteriores, Israel Katz, reciba al presidente ruso.
