Este viernes las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) publicaron las conclusiones de la investigación preliminar sobre la muerte de la periodista Shireen Abu Akleh, asesinada el miércoles durante un tiroteo entre palestinos y fuerzas israelíes.
“La conclusión de la investigación provisoria es que no es posible determinar el origen del disparo que mató a la reportera”, anunció el ejército israelí, a través de un informe que baraja dos hipótesis sobre el incidente: un tiroteo masivo “de cientos de balas desde varios sitios” de parte de palestinos hacia fuerzas israelíes, o un disparo de un combatiente israelí desde una distancia aproximada de 200 metros.
El informe explica: “Durante los combates uno de los soldados disparó varias balas desde una rendija del jeep, a través de una mira telescópica, hacia un terrorista que disparaba contra el vehículo militar. Existe la posibilidad de que la reportera estuviera cerca del terrorista armado, detrás de él, y fuera alcanzada por los disparos del combatiente”.
Las FDI afirmaron que “recibir la bala para un examen profesional podría decidir entre las dos opciones” pero que hasta el momento del lado palestino no respondieron al pedido israelí de “realizar una investigación conjunta o transmitirnos los resultados de sus investigaciones”.
"Israel también ofreció a los representantes palestinos (así como a un representante estadounidense) estar presentes y participar en los procesos de examen profesional, patológico, balístico. e incluso en el examen forense de la bala. Estas propuestas encontraron falta de cooperación y ninguna respuesta", insistió el comunicado del ejército.