Angela Merkel hará su primera visita al Memorial Auschwitz-Birkenau hoy, tras 14 años como canciller alemana, y llevará una donación de 60 millones de euros para ayudar a conservar el sitio donde los nazis dirigieron su más grande campo de exterminio, afirmó el museo.
Merkel no ha evitado reconocer la responsabilidad alemana por las atrocidades cometidas durante la Segunda Guerra Mundial, pero su visita asegurará que seguirá los pasos de cancilleres anteriores, viendo el sitio antes del fin de su mandato.
“Auschwitz es un museo, pero también el mayor cementerio del mundo. La memoria es la clave de la construcción del presente y del futuro”, afirmó el director del museo, Piotr Cywinski, a Reuters antes de la visita de Merkel, invitada por la Fundación Auschwitz.
Merkel anunciará la donación, provista por el gobierno federal alemán y gobiernos regionales, durante una ceremonia por el décimo aniversario de la Fundación Auschwitz-Birkenau.
Alemania se convertirá de esta forma en el mayor donante de la fundación, que financia los esfuerzos de conservación del sitio donde más de un millón de personas murieron en lo que era Polonia ocupada.
Más de tres millones de los 3,2 millones de judíos de Polonia fueron asesinados por los nazis, la mitad de todos los judíos asesinados en el Holocausto.
El dinero asegurará la conservación de 30 barracas de ladrillo en el campo Birkenau, incluyendo una cocina vieja y una letrina.
“Muchos de los edificios no fueron construidos para que duraran”, explicó Cywinski, agregando que la fundación necesita entre U$S 4,62 y U$S 5,13 millones anualmente.
“Quiero demostrar que estos fondos son creados como una herramienta para el futuro, para la próxima generación, para la educación. No es una forma de apuntar con el dedo a la historia de un país, porque ése no es mi rol”, destacó.
Lo recaudado por la fundación, que depende de pagos de bonos y fue abierta hace una década, demostró ser menos de lo esperado en parte por la crisis financiera de 2009.
Cywinski, quien también consideró realizar inversiones riesgosas, apeló a donaciones de países hace dos años. Alemania es el único país que hasta la fecha ha respondido. Estados Unidos y Polonia previamente habían sido grandes donantes.
En el pasado, Merkel ha visitado otros campos de concentración y se ha reunido con sobrevivientes de Auschwitz.
