Israel y Chipre llegaron a un entendimiento sobre las reservas de gas que se extienden a ambos lados de su frontera marítima. Así lo expresó hoy (martes) la ministra de energía chipriota, en un paso clave para poner en movimiento el proyecto de extracción que lleva nueve años frenado.
El desarrollo del yacimiento gasífero Afrodita en aguas chipriotas se retrasó, desde su descubrimiento en 2011, a causa de que una pequeña parte se extiende hasta la zona marítima de Israel. La ministra de energía chipriota, Natasa Pilides, sostuvo que junto a su par israelí, Yuval Steinitz, acordaron un marco de trabajo para resolver el problema y que las directrices serían transmitidas a las empresas involucradas en el proyecto.
"El marco se establecerá en una carta conjunta que se encuentra en proceso. Ambos estamos satisfechos de haber alcanzado este punto después de nueve años de discusión", declaró Pilides a la prensa.
Steinitz, presente en Chipre para la firma de un memorandum de entendimiento en otro asunto, indicó que había una "posibilidad justa" de una eventual resolución. "Nada es seguro, pero hay una buena posibilidad de que esto nos lleve a una solución en este pequeño pero significativo obstáculo en las maravillosas relaciones y cooperación entre Chipre e Israel en energía y en muchas áreas", señaló en declaraciones a la prensa chipriota.
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Los ministros de energía de Chipre, Israel y Grecia firman un acuerdo sobre el proyecto 'EuroAsia Interconnector' en el Palacio Presidencial en Nicosia, Chipre.
(Reuters)
Chipre firmó en 2019 una concesión de 25 años a Noble Energy (Estados Unidos), Shell (Inglaterra y Países Bajos) y Delek Drilling (Israel) para la explotación del yacimiento Afrodita. Israel había expresado que se requería un acuerdo previo a los comienzos del trabajo de explotación, ya que parte de las reservas se encontraban en aguas marítimas israelíes. El campo Afrodita contiene un estimado de 4,1 billones de pies cúbicos de gas. La discusión comprende un aproximado del 10% de esas reservas.
Chipre, Israel y Grecia firmaron el lunes un acuerdo preliminar para construir el cable de alimentación de energía submarino más largo y profundo del mundo que atravesará el lecho marino del Mediterráneo a un costo de unos 900 millones de dólares y conectará sus redes eléctricas.
El proyecto, llamado Interconector Euro-Asia, proporcionará una fuente de energía de respaldo en tiempos de emergencia, expresó el ministro de Energía israelí de viaje oficial en Chipre para firmar el acuerdo con sus contrapartes.