El gobierno de Noruega decidió congelar más de la mitad del dinero que tenía asignado para transferir al Ministerio de Educación palestino, en función de mensajes de incitación al odio contra Israel que aparece en los libros de texto que financiaba el país europeo.
Ine Marie Eriksen Søreide, ministra de Relaciones Exteriores, anunció esta decisión seis meses después de que el parlamento noruego recomendara el congelamiento de fondos tras considerar al programa escolar palestino como “devastador para el proceso de paz”.
La medida de Noruega, uno de los principales aliados de la AP, detiene la transferencia de fondos equivalentes a casi 6 millones de dólares y surge luego de un informe del Instituto de Investigación IMPACT-SE que revelaba los mensajes de odio que aparecen en el material de estudio para niños palestinos.
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Uno de los contenidos educativos palestinos que despertaron la condena mundial.
(Ynet)
Algunos de los textos educativos citados incluyen ejercicios de matemática para cuarto grado a través del conteo de mártires terroristas, un ejercicio de física consistente en la explicación de la fuerza de una piedra lanzada hacia soldados de las FDI, y un párrafo en el que se afirma que la yihad (guerra santa) es "lo más importante de la vida".
“Es una decisión sin precedentes y una postura ética que aboga por una educación tolerante como medio para dirimir disputas. Y es un mensaje claro de que los líderes de Noruega no permitirán que su generosidad se use para la violencia diaria, el odio y la incitación hacia Israel”, aseguró Marcus Scheff, director del Instituto IMPACT-SE que lideró la investigación sobre los libros escolares palestinos.
“Esperamos que esta valiente decisión de uno de los aliados más cercanos a la Autoridad Palestina sirva para ejercer presión y detener la incitación a la violencia en la educación de las próximas generaciones”, agregó Eric Aggasi, vicepresidente de la misma organización.
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El parlamento de Noruega ya había recomendado esta medida en diciembre de 2019.
(AFP)
La ministra Eriksen Søreide indicó que la inquietud por los libros escolares fue elevada al Ministerio de Educación palestino y a Mohamed Shtaye, primer ministro de la AP. Además, aseguró que futuras ayudas de Noruega a los palestinos estarán subordinadas a “mejoras en el programa educativo”.
La medida del gobierno de Noruega hacia la AP se suma a acciones realizadas por otros entes de relevancia mundial. El mes pasado el parlamento de la Unión Europea aprobó una condena formal a la incitación a la violencia en libros escolares palestinos. En diciembre el Congreso de EE.UU. votó por unanimidad la publicación de un informe anual sobre el plan de estudios palestino. Y en agosto la ONU también había denunciado la situación y exigió a la AP la eliminación de este contenido.
