Irán instó al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) de las Naciones Unidas a evitar la publicación de detalles "innecesarios" sobre el programa nuclear de Teherán, informó la televisión estatal iraní el domingo, un día después de que Alemania, Francia y Gran Bretaña expresaran que Irán "no tiene un uso civil verosímil” para el desarrollo de uranio metálico.
El informe de la prensa citaba una declaración del departamento nuclear de Irán en la que pedía a la OIEA que evitara publicar detalles sobre el programa nuclear de Irán que pudieran causar confusión. “Se espera que la agencia evite proporcionar detalles innecesarios y generar malos entendidos”, sostenía el comunicado.
El sábado, Alemania, Francia y Reino Unido presionaron a Irán para que retrocediera en su plan de desarrollar uranio metálico, calificándo el hecho como "el último incumplimiento planificado” del acuerdo nuclear firmado en 2015 con las potencias mundiales. El objetivo del acuerdo es evitar que Irán desarrolle armas nucleares, algo que el país insiste no está entre sus objetivos.
"Irán no tiene un uso civil verosímil para el uranio metálico", expresaron en un comunicado conjunto los tres países de Europa. "La producción de uranio metálico tiene implicaciones militares potencialmente graves".
El jueves, la OIEA comunicó que Irán había informado la instalación de equipos para la producción de uranio metálico. La agencia señaló que Teherán afirma que su desarrollo tiene por objetivo el diseño de “un tipo mejorado de combustible".
Irán respondió a las potencias europeas a través de un comunicado en el que sostuvo haber informado al organismo de control de la ONU hace casi veinte años acerca de sus planes para la producción "pacífica y convencional" de uranio metálico. También indicó haber proporcionado hace dos años la información actualizada sobre sus planes para producir combustible de Siliciuro.
En el comunicado agregaron además que el uranio metálico es un "producto intermedio" en la fabricación de Siliciuro de Uranio, un combustible utilizado en reactores nucleares que es más seguro y tiene más capacidad de energía que el combustible a base de óxido de uranio, que Irán produce actualmente.
Alemania, Francia e Inglaterra junto a Estados Unidos, Rusia y China firmaron el acuerdo nuclear en 2015 con Irán a través del cual prohibían la investigación y producción de uranio metálico. Donald Trump retiró unilateralmente a Estados Unidos del acuerdo en 2018 y volvió a imponer sanciones económicas a Irán.
El régimen de Teherán, desde ese momento, abandonó gradual y públicamente los límites del acuerdo. El presidente electo Joe Biden, que era vicepresidente cuando se firmó el acuerdo durante la administración de Obama, expresó su intención de que Estados Unidos vuelva al acuerdo.