Egipto, Jordania, Arabia Saudita, Catar, Emiratos Árabes Unidos, la Autoridad Palestina y la Liga Árabe emitieron un comunicado conjunto el sábado contra el deseo del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de impulsar la emigración de palestinos de la Franja de Gaza a los países vecinos, un objetivo que ha reiterado repetidamentedurante la última semana.
"Enfatizamos que rechazamos la idea de desarraigar a los palestinos de sus tierras por cualquier razón", dice el comunicado, que fue emitido al mismo tiempo que una reunión en El Cairo entre los ministros de Relaciones Exteriores de varios países y el secretario general del Comité Ejecutivo de la OLP, Hussein al-Sheikh.
En un comunicado conjunto, los dos países dijeron que esperan trabajar con la administración Trump "para lograr una paz justa e integral en el Medio Oriente, basada en la solución de dos estados". Los representantes de los países, según el informe, "discutieron los esfuerzos para apoyar la causa palestina y mantener el alto el fuego en Gaza". Entre otras cosas, se planteó la cuestión del "mecanismo" que permitiría a la Autoridad Palestina llevar a cabo sus funciones en la Franja de Gaza.
"Se deben apoyar los esfuerzos para garantizar la implementación del Acuerdo de Gaza en todas sus etapas y cláusulas", agregaron. Los ministros que participaron en la conferencia destacaron el "papel insustituible de la UNRWA" y dijeron que rechazan cualquier intento de "dividir la Franja de Gaza": "Israel debe retirarse de todo el territorio".
También se informó que los ministros de Asuntos Exteriores que se reunieron en El Cairo hicieron hincapié en la reconstrucción de Gaza que garantizaría la supervivencia de los palestinos en su tierra, y subrayaron que la comunidad internacional debe comenzar la aplicación real de la solución de dos Estados. Esta mañana, la cadena de televisión jordana Al-Malakah informó que durante su reunión "los ministros discutirán los acontecimientos en la región, especialmente los esfuerzos para fortalecer el alto el fuego en Gaza y la transferencia de ayuda humanitaria a todas las partes de la Franja de Gaza".
Más tarde, la oficina presidencial egipcia dijo que el presidente egipcio, Abdel Fattah al-Sisi, habló por teléfono con Trump. En la conversación, Al-Sisi dijo que la comunidad internacional confía en la capacidad del presidente Trump para alcanzar un acuerdo de paz permanente e histórico.
¿Absorción forzada de los habitantes de Gaza? La insistencia de Trump
El martes, el presidente estadounidense siguió insistiendo en que los vecinos de Israel, Egipto y Jordania, que también son signatarios de la declaración conjunta, absorban a los residentes de Gaza, como propuso en su plan de "reubicación" para los cientos de miles de palestinos en la devastada Franja. "Ellos lo harán, nosotros hacemos mucho por ellos, y ellos lo harán", insistió el presidente.
Cuando se le preguntó si había algo que pudiera hacer para obligarlos a dar el paso, respondió: "Lo harán, lo harán, ¿de acuerdo? Hacemos mucho por ellos, y ellos lo harán". No agregó más que eso, ni dio más detalles sobre lo que haría si continuaban expresando oposición a la medida, como lo hicieron en la declaración de hoy.
3 צפייה בגלריה


"Rechazamos la idea de desarraigar a los habitantes de Gaza", dice la declaración.
(Omar Al-Qattaa, AFP)
Trump planteó por primera vez la propuesta en la noche entre el sábado y el domingo, después de la segunda fase del acuerdo de rehenes, y dijo a los periodistas a bordo del Air Force One que Gaza es ahora un enorme "sitio de demolición" y que para reconstruirlo sus residentes deben ser evacuados a Jordania o Egipto, al tiempo que enfatizó que ésta puede ser una solución a largo plazo, no sólo a corto plazo. "Estamos hablando de trasladar a un millón y medio de personas, y vamos a limpiar todo este lugar", dijo.
Por el momento, aunque la derecha israelí se ha apresurado a adoptar la idea, en la práctica parece que la fuerte oposición de los propios palestinos –y de Jordania y Egipto– ha hecho que el plan sea inviable. Tampoco está claro hasta qué punto Trump realmente tiene la intención de progresar en la práctica, e incluso su aliado más cercano, el senador republicano proisraelí Lindsey Graham, ha expresado grandes dudas sobre sus posibilidades de materialización.