Irán apagó dos cámaras de vigilancia del organismo de control nuclear de las Naciones Unidas que monitoreaban una de sus plantas nucleares, informó el miércoles la televisión estatal iraní.
La medida parece ser una nueva táctica de presión de Teherán, cuando las naciones occidentales se disponen a votar una censura contra Irán en una reunión esta semana del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
El informe de la televisión estatal iraní señaló: “Hasta ahora, el OIEA no sólo ha sido ingrato con la amplia cooperación de Irán, sino que la ha considerado un deber. A partir de hoy, las autoridades competentes han ordenado que se apaguen las cámaras de vigilancia del Medidor de Enriquecimiento en Línea (OLEM, por sus siglas en inglés)”.
En la actualidad Irán enriquece uranio en sus sitios nucleares subterráneos de Fordow y Natanz. Desde Teherán informaron que la Organización de Energía Atómica de Irán, la agencia civil que lleva a cabo el programa nuclear, supervisó el apagado de las cámaras y señaló que el 80% de las cámaras seguirán funcionando como antes.
Irán y las potencias mundiales firmaron en 2015 el acuerdo nuclear por el cual Teherán limitó drásticamente su enriquecimiento de uranio a cambio del levantamiento de las sanciones económicas. En 2018, el entonces presidente Donald Trump retiró unilateralmente a Estados Unidos del acuerdo, lo que aumentó las tensiones en todo el Medio Oriente y provocó una serie de ataques e incidentes.
El OIEA, con sede en Viena, declinó hacer comentarios sobre el informe.
Las conversaciones en Viena sobre un retorno al acuerdo se encuentran estancadas desde abril. Desde el colapso del acuerdo, Irán opera centrífugas avanzadas y tiene una reserva de uranio enriquecido que crece rápidamente. Los expertos en no proliferación advierten que Irán ha enriquecido hasta un grado de 60% de pureza, un nivel muy cercano al grado armamentístico de 90%, necesario para la fabricación de armas nucleares.
Irán insiste en que su programa tiene fines pacíficos, aunque los expertos de las Naciones Unidas y las agencias de inteligencia occidentales dicen que Irán tuvo un programa nuclear militar organizado hasta 2003.
Israel ha amenazado en el pasado con llevar a cabo un ataque preventivo para detener a Irán, y recaen sobre él las sospechas por una serie de asesinatos recientes contra funcionarios iraníes.
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Funcionarios iraníes asesinados: Siad Khodai, Dr. Kamran Malapur, Mansour Rasooli, Dr. Ayub Antzari, Hassan.
“El año pasado comenzó un cambio estratégico en la política israelí sobre Irán”, dijo el lunes el primer ministro Naftalí Bennett. “Israel está operando contra los muchos tentáculos del terrorismo iraní. Los días en que Irán tenía inmunidad cuando atacaba a Israel y difundía su terrorismo a través de sus representantes, se terminaron. Estamos operando en todas partes, todo el tiempo, y lo seguiremos haciendo", advirtió.
“En los últimos años, Irán ha cruzado líneas rojas, especialmente en abril pasado, meses antes de que este gobierno llegara al poder, cuando comenzó a enriquecer uranio al 60% sin respuesta internacional”, dijo el primer ministro. “Israel no puede y no aceptará tal situación”.
Bennett agregó: "Esperamos que la Junta de Gobernadores del OIEA emita una clara señal de advertencia ante el régimen de Teherán y deje en claro que si continúan con su desafiante política nuclear, pagarán un alto precio".
