El martes por la noche, durante una reunión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, el embajador de Israel ante la ONU, Gilad Erdan, lució en su vestimenta una réplica de una estrella amarilla de la época nazi junto con la inscripción "nunca más".
"Si este Consejo se hubiera reunido en junio de 1944, se ocuparía de la cantidad de combustible que tienen los nazis y del elevado número de bajas que los alemanes han sufrido contra Gran Bretaña", sostuvo Erdan.
"Además, la ONU pediría un alto el fuego antes de que los rusos recuperaran Stalingrado", agregó.
"Cuando los bebés judíos fueron quemados en Auschwitz el mundo permaneció en silencio, hoy los bebés judíos son quemados en Be'eri y en todo el sur por Hamás y el mundo permanece en silencio una vez más", planteó el enviado israelí.
"Algunos de ustedes no aprendieron nada en los últimos 80 años. Algunos de ustedes olvidaron por qué se creó este organismo... Al igual que mis abuelos, y los abuelos de millones de judíos, a partir de ahora mi equipo y yo vamos a llevar estrellas amarillas... Llevaremos esta estrella hasta que despierten y condenen las atrocidades de Hamás", sumó.
La estrella amarilla era un distintivo que los judíos estaban obligados a llevar en los territorios ocupados por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Se utilizó como herramienta de identificación, discriminación y persecución, marcando a los judíos para su segregación y eventual deportación a campos de concentración.
En su discurso, el embajador equiparó al líder supremo iraní, Ali Jamenei, con Adolf Hitler. "El régimen de ayatolás de Irán son los nazis de hoy, Jamenei es el führer, y su ejército incluye a Hamás, la Jihad Islámica, Hezbolá, Houthis, la Guardia Revolucionaria y otras organizaciones terroristas.... Si Hitler tuviera una cuenta de Twitter, sería igual que la de Jamenei", comentó Erdan.
Luego, condenó al secretario general de la ONU, António Guterres, quien fue duramente criticado por decir que la masacre de Hamás "no ocurrió en el vacío".
Sobre eso, Erdan comentó: "Jamenei dijo que Israel se está muriendo y llamó a su destrucción, y el secretario general de la ONU se reúne con él sin vergüenza".
Danny Dayan, presidente de Yad Vashem, el monumento oficial de Israel a las víctimas del Holocausto, no vio con buenos ojos la maniobra de Erdan.
"Este acto deshonra tanto a las víctimas del Holocausto como a Israel. La estrella amarilla representa el desamparo del pueblo judío, sometido a las gracias de otros. Hoy tenemos un Estado independiente y un ejército fuerte. Somos nuestros propios amos. Por eso llevaremos una bandera azul y blanca, no una estrella amarilla", manifestó Dayan.