El ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Mohammad Javad Zarif, manifestó el martes que el ataque contra la instalación nuclear de Natanz, por el que responsabiliza a Israel, fue una "muy mala apuesta" que fortalecería a Teherán en las conversaciones para reactivar el acuerdo nuclear de 2015 con las principales potencias. Asimismo, advirtió a Estados Unidos que no conseguiría ninguna ventaja en las discusiones sobre la cuestión nuclear iraní a través de "actos de sabotaje" o "sanciones".
"No tenemos ningún problema en volver a nuestros compromisos (...) pero los estadounidenses tienen que saber que ni las sanciones ni actos de sabotaje les darán un instrumento de negociación y que esas acciones solo complicarán más la situación para ellos", declaró Mohamad Javad Zarif.
Zarif formuló estas declaraciones 48 horas después de un accidente en un centro nuclear iraní calificado de "sabotaje" por la República Islámica y en presencia de su homólogo ruso Serguei Lavrov, de visita en Teherán.
Teherán acusó a Israel por lo ocurrido en la planta de enriquecimiento de uranio en Natanz, en el centro de Irán, en momentos en que se llevan a cabo negociaciones en Viena para intentar salvar el acuerdo internacional sobre el programa nuclear iraní firmado en la capital austríaca en 2015.
"Pensaron que lo que hicieron en Natanz sería en desventaja de Irán... Les aseguro que en un futuro cercano Natanz va a pasar a centrifugadoras más perfeccionadas (...) Los israelíes (...) hicieron una muy mala apuesta", declaró Zarif.
"Si pensaban que podían frenar los esfuerzos de Irán para que se levanten las sanciones contra el pueblo iraní, hicieron una muy mala apuesta", agregó.
Las discusiones de Viena reúnen a Irán y las grandes potencias que permanecen en el acuerdo (Alemania, China, Francia, Reino Unido, Irán y Rusia), bajo los auspicios de la Unión Europea. Washington participa pero sin contacto directo con los iraníes.
Estados Unidos, bajo la presidencia de Donald Trump, denunció unilateralmente en 2018 el acuerdo nuclear con Irán, restableciendo de paso las sanciones estadounidenses que se habían levantado en el marco del pacto.