Egipto intensificó la mediación entre Israel y grupos palestinos en un intento de frenar la violencia en Jerusalem y Cisjordania para evitar que se extienda a la Franja de Gaza antes del mes sagrado musulmán del Ramadán, según informaron fuentes oficiales.
Esta semana, El Cairo recibió a dirigentes del grupo islamista Hamás, que gobierna Gaza, y del grupo aliado Jihad Islámica Palestina (YIP), según los funcionarios. Antes, se habían celebrado conversaciones con representantes israelíes, añadieron.
"Egipto entiende que si las cosas estallan en Cisjordania se desencadenará una explosión también en Gaza"
Funcionario de la AP
Dos funcionarios egipcios, que hablaron bajo condición de anonimato, dijeron que El Cairo creía que la situación podría descontrolarse aún más, sobre todo teniendo en cuenta la sensibilidad palestina ante el control israelí del acceso a Jerusalem durante el Ramadán, que comienza a finales de marzo.
Egipto quería que Estados Unidos hiciera un llamado a Israel para que contribuyera a frenar una escalada, según los funcionarios. Egipto, por su parte, apelaba a la PIJ, que rechaza el contacto con el Estado judío.
"Más que nunca, los egipcios están preocupados por un posible nuevo enfrentamiento armado en 2023 porque se dan cuenta de que sería difícil contener las acciones de algunos ministros del nuevo gobierno extremista de Israel", comentó a Reuters un funcionario palestino.
"Egipto entiende que si las cosas estallan en Cisjordania se desencadenará una explosión también en Gaza", agregó.
El portavoz del PIJ, Daoud Shehab, acusó a Israel de intentar cambiar el "statu quo" en Cisjordania y Jerusalem, en referencia al plan del nuevo gobierno de ampliar los asentamientos judíos y a lo que los palestinos consideran una invasión en un lugar disputado de la ciudad santa que es sagrado para ambas religiones.
Shehab manifestó que el grupo comunicó a Egipto que "nadie podrá contenerse" si "las provocaciones israelíes continúan durante el Ramadán".