Han pasado dos semanas desde el ataque en Damasco, y desde ese día Irán amenaza constantemente con tomar represalias y se jacta de "crear pánico en las calles israelíes". Ahora la ofensiva iraní ha comenzado, y el líder supremo de Irán, Ali Khamenei, tuiteó brevemente: "El malvado régimen será castigado".
Su asesor militar, Yahya Rahim Safavi, dijo hoy: "Los sionistas, y quienes los defienden, están horrorizados porque no conocen la naturaleza de la respuesta iraní", pero la calle iraní tampoco está tranquila por la tensión de seguridad que se ha creado.
Los iraníes están siguiendo los intercambios entre Israel e Irán, algunos quieren evitar la guerra con Israel y llaman a la calma, mientras que otros exigen una respuesta apropiada al ataque a Damasco "más fuerte que los ataques anteriores".
"No sé quién tiene la culpa y quién no, pero es mejor llegar a un compromiso para que no comience la guerra y para que no mueran personas inocentes", dijo a la AFP Maryam, una residente iraní. Los acontecimientos de seguridad sorprendieron a Irán al final de la festividad de Nowruz (el Año Nuevo iraní), y la incertidumbre en los próximos días está dificultando las cosas para los residentes. "Si Dios quiere, nuestro gobierno priorizará la lógica sobre la emoción", dijo a la AFP Salehi, un ex empleado del gobierno en Teherán, y agregó: "Si ése es el caso, no habrá confrontación".
Por otro lado, algunos residentes creen que el gobierno iraní debería atacar a Israel con fuerza. "Esta vez tenemos que responder con más seriedad y determinación", dijo Yusuf a la AFP. Un residente llamado Ihsan entrevistado por la agencia también dijo que era "razonable" responder porque los israelíes "atacaron un edificio diplomático iraní" en Damasco. "La guerra siempre es mala y preocupante, una persona que ha experimentado la guerra nunca la apoyará, pero a veces para lograr la paz es necesaria la guerra", agregó Ahsan.
"La guerra siempre es mala y preocupante; pero a veces para lograr la paz es necesaria la guerra"
Cabe señalar que Teherán no se encuentra en una situación económica sencilla, incluso sin guerra, y también debe tener en cuenta a la opinión pública. "La perspectiva de una guerra preocupa a los empresarios del país, especialmente a los que dependen del tipo de cambio de las monedas extranjeras. Algunos temen que provoque escasez de alimentos", explicó el experto en relaciones internacionales Ahmed Zidabadi.
Ali Bigdali, otro experto en relaciones internacionales, también aclaró en una entrevista a un periódico de Teherán las implicaciones estratégicas de un ataque: "Un ataque contra Israel podría arrastrar a Irán al borde de una guerra que no quiere. Esto es en interés de Israel". Dijo que un ataque le daría al gobierno de Netanyahu "justificación para la guerra en Gaza y pondría fin a la guerra en Gaza a la sombra de la guerra con Irán".
Según un informe de AFP, Hossein Jabari, ex viceministro de Relaciones Exteriores de Irán, expresó que Teherán debería elegir la opción más barata y rentable para responder a Israel y que el objetivo más legítimo serían las instalaciones militares y de seguridad de Israel en los territorios ocupados, especialmente en los Altos del Golán.
A pesar de la preocupación pública de Irán por la situación, el periódico saudí Asharq Al-Awsat informó durante el fin de semana que los medios iraníes habían mostrado un interés limitado en la crisis con Israel, proporcionaban una atmósfera que no insinuaba una guerra inminente en la región y los titulares hablaban de otros temas.
