Poco antes de partir desde Israel hacia Arabia Saudita, el presidente estadounidense Joe Biden viajó a la ciudad de Belén y se reunió con Mahmoud Abbas, presidente de la Autoridad Palestina.
La reunión fue definida como un "encuentro privado" y luego del mismo los líderes brindaron una conferencia de prensa conjunta en la que cada uno emitió un discurso. “Apoyamos una solución de dos estados basada en un acuerdo internacional”, sostuvo Abbas, quien leyó sus palabras escritas en una hoja de papel. “La clave para la paz regional es el reconocimiento de un Estado palestino, la paz será posible con el cese de la ocupación”, agregó.
Abbas también pidió a Biden la reapertura del consulado estadounidense en Jerusalem Este y la eliminación de la OLP de su lista de organizaciones terroristas. A su vez, exigió “poner fin a la ocupación, detener la construcción de asentamientos y frenar la violencia de los colonos”, en referencia a la presencia israelí en Cisjordania.
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Joe Biden, presidente de EE.UU. y Mahmoud Abbas, presidente de la Autoridad Palestina.
(Reuters)
Biden, cuyo discurso fue asistido por una pantalla, ratificó su apoyo a la solución de dos estados para el conflicto entre israelí-palestino. “Mi compromiso con este objetivo no cambió en todos estos años, creemos que es la mejor manera de lograr seguridad, prosperidad, libertad y democracia para palestinos e israelíes”, aseguró.
“El pueblo palestino merece un estado propio, independiente y soberano. Los dos pueblos tienen raíces profundas y antiguas en esta tierra, y debería haber dos estados que convivan en paz y brinden igualdad de derechos a todos sus ciudadanos, eso es lo más importante”, señaló el mandatario estadounidense.
Biden reconoció que una solución de dos estados parece lejana mientras los palestinos tienen restricciones de movimiento. “El pueblo palestino ha sido lastimado, pero nunca nos daremos por vencidos en la lucha por la paz, no podemos permitir que la desesperanza nos robe el futuro”, dijo y sentenció: “Aunque no se pueda volver a las negociaciones ahora mismo, Estados Unidos bajo mi liderazgo no dejará de intentar el acercamiento entre palestinos e israelíes”.
Además, el presidente norteamericano convocó al liderazgo palestino a “aprovechar el momento” de avanzar en un proceso de paz en esta etapa histórica en que Israel afianza lazos con países árabs de Medio Oriente. “Veo lo difícil que son los desafíos, pero debemos poner fin a la violencia que destruyó tantas familias, demasiados palestinos e israelíes perdieron a sus familiares este año”, señaló.
En la sala de periodistas una de las sillas de la fila delantera tenía una fotografía de Sheerin Abu Akleh, periodista palestina asesinada durante un intercambio de disparos en Jenin, cuya muerte es atribuida a fuerzas israelíes según investigaciones palestinas. “Era una orgullosa ciudadana estadounidense y palestina, e hizo un trabajo muy importante en los medios, espero que su legado inspire a los jóvenes”, comentó Biden sobre el caso, evitando referencias a la investigación sobre la muerte de la reportera.
Tras los discursos Biden visitó la Iglesia de la Natividad y desde allí se trasladó en helicóptero hasta el aeropuerto internacional Ben Gurion. Tras una breve ceremonia de despedida con la presencia del primer ministro israelí Yair Lapid y el presidente Isaac Herzog, la comitiva estadounidense viajará a Arabia Saudita en la segunda etapa de la gira por Medio Oriente.
