¿Qué tan preocupado está Israel para considerar los nuevos peligros de las aspiraciones nucleares de Irán? En vísperas de una cuarta elección en dos años, una pandemia de coronavirus y una ciudadanía exhausta y económicamente devastada, el gobierno incapacitado puede ver la retórica que sale de Teherán como un mero reposicionamiento táctico antes de las renovadas negociaciones sobre el acuerdo nuclear de 2015.
Cuando Irán anunció, el 1 de enero, que comenzaría a enriquecer uranio al 20%, podía estar seguro de que no seguiría ningún ataque estadounidense o israelí.
Tal movimiento sólo vendrá cuando Irán reanude su proyecto militar para producir una ojiva nuclear. Por lo que sabemos, los iraníes todavía no pueden hacer esto, pero no está claro cuándo podrían hacerlo.
La eliminación del principal científico nuclear de Irán, Mohsen Fakhrizadeh, en noviembre, que se atribuyó a Israel, se hizo para frenar el proyecto militar nuclear.
Pero hasta que haya pruebas de que el asesinato logró su objetivo y el proyecto ahora está en suspenso, Israel debe ver cualquier cambio en el programa nuclear de Teherán como una grave amenaza.
Cuando el Parlamento de Irán votó el mes pasado para acelerar su programa nuclear, Israel debería haber lanzado un esfuerzo diplomático masivo para ejercer presión sobre el régimen. Pero Teherán entendió que pocos podrían molestarse en considerar las preocupaciones de Jerusalem mientras una pandemia está en pleno proceso.
3 צפייה בגלריה
Mohsen Fakhrizadeh, el llamado "padre de la bomba" iraní fue asesinado en noviembre, en un ataque atribuido a Israel.
(AP)
Han estado trabajando durante 30 años para lograr capacidades nucleares y han estado esperando el momento en que el mundo estuviera ocupado en otra cosa. Para Israel, ese momento ya es demasiado tarde.
Irán volvió a su campaña de agresión en el Golfo Pérsico el 31 de diciembre, interfiriendo con la libre circulación de los petroleros. Y cuando el secretario de Defensa de Estados Unidos, Christopher Miller, anunció en respuesta que Estados Unidos aumentaría su presencia militar en el área, Teherán lanzó ejercicios militares, haciendo alarde de sus nuevas capacidades de UAV y misiles balísticos.
Los iraníes están lejos de ser tontos. No entregarán al presidente saliente de los Estados Unidos, Donald Trump, un casus belli con un acto directo de agresión contra el ejército estadounidense.
3 צפייה בגלריה
Un submarino estadounidense y un buque de guerra patrullan el Golfo Pérsico en una demostración de fuerza hacia Irán.
(Gentileza)
La nueva administración de Joe Biden y las negociaciones nucleares que probablemente comenzarán después del 20 de enero están a su alcance. Sin duda, incluirán a muchas de las mismas personas que dirigieron los esfuerzos de negociación de Obama hace una década, que están comprometidas con el acuerdo alcanzado durante su mandato.
Por lo tanto, agregaron obstáculos como una mayor producción de uranio, que se puede eliminar fácilmente a cambio de logros más importantes.
Israel debe estar preparado para el día después de que Biden asuma el cargo y las negociaciones entre Estados Unidos e Irán que pueden dejar a Jerusalem una vez más fuera del circuito.
¿Se puede confiar en un gobierno interino para que esté a la altura de ese desafío?
