Ha pasado casi una semana desde que el presidente palestino, Mahmoud Abbas, amenazó con retirarse de todos los acuerdos existentes con Israel si el Estado judío avanza con su intención de extender la soberanía sobre los asentamientos de Judea y Samaria y el Valle del Jordán.
En la práctica, sin embargo, las relaciones entre la Autoridad Palestina e Israel están estructuradas de tal manera que dejan a Ramallah sin una opción real de cortar los lazos con Jerusalem y continuar funcionando de manera independiente.
La cooperación entre Israel y los palestinos se construyó gradualmente y con gran esfuerzo desde 2008, y ha resistido varias pruebas y tribulaciones a lo largo de los años.
4 צפייה בגלריה
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, durante su discurso en el cual declaró nulos los acuerdos con Israel.
(Reuters)
Este esfuerzo mutuo consiste en asuntos de seguridad, pero se centra principalmente en funciones civiles de rutina, como permitir que los servicios de emergencia palestinos viajen entre los territorios controlados por la Autoridad Palestina e Israel y viceversa, e incluso autorizar la transferencia de bienes.
De hecho, bajo el radar, los productos continuaron cruzando de Israel a la Autoridad Palestina en los últimos días sin mucho esfuerzo.
Los asuntos parecen continuar como siempre. Hasta el momento.
Varias horas después de la aparición de la noticia del fin de los lazos de seguridad, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) arrestaron a más de 20 palestinos en una serie de redadas en Judea y Samaria. Tan pronto como la calma entró en vigor, los arrestos se detuvieron.
Se presume que las dos cosas pueden tener una conexión, pero los palestinos también acaban de finalizar la festividad de Eid al-Fitr, y nadie en Israel estaba interesado en interrumpir las celebraciones.
4 צפייה בגלריה
Policías de Hebrón bloquean el ingreso a Hebrón durante el brote de coronavirus.
(EPA)
Pero esta tendencia ocurre cada año y la amenaza palestina aún no ha resistido la prueba.
No está claro si las FDI reanudarán las redadas ahora que terminó la festividad islámica.
Las reuniones oficiales de rutina entre funcionarios de seguridad israelíes y palestinos también se detuvieron, pero es poco probable que suceda lo mismo en la cooperación entre funcionarios de alto rango, por ejemplo, entre los servicios de inteligencia, por orden de Abbas.
Los palestinos ya han cortado los lazos con Israel antes durante la crisis del Monte del Templo de 2017, pero los restablecieron unas semanas más tarde.
4 צפייה בגלריה
Soldados israelíes durante una operación antiterrorista en Judea y Samaria.
(Unidad de Portavoces de las FDI)
En ambos casos, Israel dejó a los palestinos un salvavidas. Todavía pueden transportar mercancías a través de la frontera si lo desean y es probable que las FDI también permitan que los pacientes palestinos reciban tratamiento en Israel.
Israel elige dejar el balón en el campo de los palestinos, por el momento, para no avivar más las llamas y no permitir que estas exageradas amenazas se materialicen.
Mientras tanto, las agencias de seguridad palestinas también deben lidiar con la creciente inquietud entre los civiles, especialmente en los campos de refugiados, que se están cansando del bloqueo impuesto por el coronavirus.
La Autoridad Palestina impuso un conjunto de estrictas restricciones de distanciamiento social para evitar reuniones durante Eid al-Fitr después de que una cantidad considerable de directivas ya había sido levantada.
4 צפייה בגלריה
El primer ministro palestino, Mohammad Shtayyeh, durante una reunión con funcionarios de seguridad en Ramallah.
(Ynet)
El público no estaba demasiado impresionado y decidió ignorar las nuevas órdenes, lo que, a su vez, condujo a las fuerzas de seguridad a tomar medidas enérgicas y violentas contra grandes multitudes.
Varios choques entre civiles y fuerzas de seguridad fueron reportados en diferentes ciudades de Judea y Samaria durante la noche del domingo.
Parece que a través de su dura respuesta, las autoridades intentaron demostrar que cortar los lazos con Israel no significa que el caos ahora reine en el terreno.
Todavía hay un "sheriff" en la ciudad y se asegurará de que nadie explote esta nueva situación para socavarla.
