Funcionarios de las Fuerzas de Defensa de Israel están a favor de un ataque contra Irán en represalia por su ataque del fin de semana contra Israel, según pudo saber Ynet. Su posición fue presentada a los líderes políticos.
Durante el domingo, se consideró un posible ataque de represalia, pero habría requerido una operación compleja. "Esto no ha terminado", expresaron los altos mandos de las FDI de forma anónima.
Las Fuerzas de Defensas esperan conseguir que otros países se unan a la coalición para poner a Irán en su sitio, naciones que ven a Teherán como una amenaza para sí mismas y para la paz mundial, a medida que se acerca a sus capacidades nucleares.
El ejército tiene una serie de planes y, según informan medios extranjeros, sabe cómo llevar a cabo ciberataques contra infraestructuras civiles críticas en Irán, atacar a científicos, utilizar drones para atacar centros de producción de aviones no tripulados y, por supuesto, lanzar misiles y ataques aéreos.
También hay una buena inteligencia, como demuestra la anticipación exacta de los objetivos de Irán en su ataque contra Israel, incluido el de la base aérea de Nevatim, en el Negév, lo que permite desplegar defensas con antelación.
Algunos de los misiles iraníes fueron lanzados contra Nevatim y las defensas aéreas estelares, construidas durante años y puestas a punto en las últimas semanas, las que evitaron daños sustanciales.
Fue el sistema Arrow el que impidió que la base fuera destruida.
Pero a pesar de ello, fue el fallo de los servicios de inteligencia a la hora de anticipar la respuesta de Irán al asesinato de su alto miembro del IRGC en Damasco a principios de este mes lo que llevó al ataque iraní, contra el que las FDI insisten ahora en que hay que tomar represalias.
La prueba llegará cuando otros iraníes de alto rango estén en el punto de mira de Israel: los responsables de actos terroristas contra Israel o de desarrollar las capacidades de Hezbolá.
¿Permitirán ahora los militares que sean su objetivo? El tiempo lo dirá.