Mucho antes de que el presidente de Estados Unidos anunciara el "Corredor Económico India-Oriente Próximo-Europa", Israel hablaba sobre el ambicioso proyecto con asesores de la Casa Blanca. El primer ministro israelí, que tiene previsto reunirse con Biden durante su estancia en EE.UU. para asistir a la cumbre de la Asamblea General de las Naciones Unidas, agradeció el plan y a Biden por su "gran esfuerzo" que condujo al histórico anuncio.
Netanyahu manifestó en un comunicado emitido a última hora de la noche del sábado que EE.UU. se puso en contacto con Israel "para tratar sobre la realización de esta oportunidad histórica" y "mantuvo contactos diplomáticos urgentes con el fin de lograr el avance", agregó.
De hecho, la idea fue planteada por primera vez por el exministro de Transporte, Israel Katz, en abril de 2017. La idea original -que él bautizó como "trenes por la paz regional"- consistía en establecer un ferrocarril que conectara Israel, Jordania, Arabia Saudita y los países del Golfo.
Al expresidente estadounidense Donald Trump le gustó y adoptó la idea de Katz, incluso después de la elección de Biden. El actual presidente de EE.UU. amplió entonces el ferrocarril a un llamado "Corredor Económico" que llegaría a la India en el Este para transferir energía, comunicación y más.
Funcionarios israelíes aclararon que este proyecto no está relacionado con la normalización con Arabia Saudita. El acuerdo entre Estados Unidos y el reino llevará algún tiempo, pero no cabe duda de que este proyecto beneficiará enormemente a Israel con el paso de mercancías procedentes de Europa y Oriente.
La idea que está actualmente sobre la mesa incluye también autopistas para camiones de mercancías que circularán entre Israel y Arabia Saudita. Según funcionarios estadounidenses, esta visión económica también incluirá a la Autoridad Palestina y más adelante incorporará el turismo.
Netanyahu elogió el "Corredor Económico", afirmando que "Israel está en el centro de un proyecto internacional sin precedentes que unirá infraestructuras de Asia a Europa" y que el Estado judío "será un nudo central en este corredor económico. Nuestros ferrocarriles y puertos abrirán una nueva puerta de entrada desde la India, a través de Oriente Próximo, hasta Europa, y de vuelta: de Europa a la India a través de Jordania, Arabia Saudita y los EAU".
Y prosiguió: "Su visión remodela la faz de nuestra región y permite hacer realidad un sueño. La iniciativa incluye la construcción de ferrocarriles, el tendido de un oleoducto de hidrógeno, la energía del futuro, el tendido de cables de comunicaciones de fibra óptica y más infraestructuras".
"El Estado de Israel aportará sus capacidades, toda su experiencia, impulso y compromiso, para hacer realidad el mayor proyecto de cooperación de nuestra historia", remarcó Netanyahu. "Todos los ministerios del gobierno recibirán instrucciones para unirse a la realización de este sueño. He ordenado al Consejo de Seguridad Nacional, en la Oficina del Primer Ministro, que coordine el trabajo del personal y también la estrecha cooperación con EE.UU. y otros países para que esta visión se haga realidad lo antes posible", agregó.
¿Qué hay detrás del ambicioso plan de Biden?
El plan de Biden es una respuesta a la expansión china y su creciente influencia en la región. EE.UU. predice que este proyecto estimulará el desarrollo económico a través de la conectividad bicontinental y la integración económica y conducirá a un crecimiento sostenible.
"A lo largo de la ruta ferroviaria, los participantes pretenden habilitar el tendido de cables para la electricidad y la conectividad digital, así como tuberías para la exportación de hidrógeno limpio. Este corredor asegurará las cadenas de suministro regionales, aumentará la accesibilidad comercial, mejorará la facilitación del comercio y apoyará un mayor énfasis en los impactos medioambientales, sociales y gubernamentales", señaló la Casa Blanca.