La Guardia Revolucionaria de Irán pidió el jueves al poder judicial de la República Islámica que procese a "aquellos que difunden noticias falsas y rumores" sobre una joven cuya muerte bajo custodia policial ha provocado protestas en todo el país.
Los manifestantes en Teherán y otras ciudades iraníes incendiaron estaciones de policía y vehículos el jueves temprano, ya que la indignación pública por la muerte no mostró signos de disminuir, con informes de que hubo ataques a las fuerzas de seguridad.
Mahsa Amini, de 22 años, murió la semana pasada después de ser arrestada en Teherán por usar un "atuendo inadecuado". Cayó en coma mientras estaba detenida. Las autoridades han dicho que iniciarán una investigación sobre la causa de su dudosa muerte, pues la familia alega que Amini no tenía ningún problema de salud cuando fue detenida.