Desde 2015, el número de ataques de ransomware se multiplicó por 15. Desde 2018 las empresas y los particulares pagaron $ 1.8 mil millones a los atacantes, según Shlomi Aviv, el gerente de Israel en el país para la subsidiaria de Dell Technologies VMware Inc.
"Detectamos más de 1 millón de ataques al día, la mayoría de ellos procedentes de Rusia, China y Corea del Norte", dijo Aviv. "Atacan todos los sectores, incluidos los de salud, producción industrial e instituciones financieras", dijo, y agregó que "nadie es inmune".
Según Aviv, con un fuerte aumento en la cantidad de datos transferidos en la web, en parte como resultado del trabajo remoto desde casa debido al brote de coronavirus, existen tres objetivos principales para los ataques: países, instituciones financieras y organizaciones políticas.
El propósito de los ataques cibernéticos contra entidades como una planta israelí de salinización de agua o un puerto en Irán es proyectar una amenaza política contra el país atacado y robar información confidencial de inteligencia, dijo Aviv. Cuando un país lanza un ataque cibernético, gasta mucho tiempo y dinero en la planificación y no deja rastros, por lo que es extremadamente difícil de detectar, agregó.
Los ataques cibernéticos contra las instituciones financieras, dijo Aviv, están destinados principalmente a extorsionar por dinero. Los ciberdelincuentes se aprovechan del hecho de que estas organizaciones a menudo están mal preparadas para un ataque de ransomware y les cobran mucho por de devolución de sus datos.
En el frente político, dijo Aviv, los ataques apuntan a la base de datos de un partido, como sucedió en los Estados Unidos, para socavar la estabilidad política de un área determinada o afectar los resultados de una elección.
"La ciberseguridad es inseparable de una estrategia comercial viable", dijo Aviv, "ya sea que estemos hablando de una nube privada o híbrida, un entorno de múltiples nubes o una red de Internet de las cosas (IoT)". Las aplicaciones son una parte indispensable de nuestra actividad comercial y, como tales, deben estar bajo una gran seguridad, agregó.
