Los informes publicados este martes por Start-Up Nation Central (SNC), SNPI, IVC y LeumiTech revelaron una caída del 42% en la inversión en startups israelíes en 2022. Según ambos informes, el golpe lo sufrieron tanto las startups en fase tardía como las que se encuentran en la fase inicial.
Según SNC y SNPI, el volumen total de inversión en 2022 se desplomó casi a la mitad: de la cifra sin precedentes de 27.000 millones de dólares en 2021 a los 15.500 millones del año pasado. No obstante, se trata del segundo mejor año de inversión de la historia para las startups locales.
A modo de comparación, las inversiones en empresas de alta tecnología de Silicon Valley también disminuyeron un 40%.
El número total de rondas de financiación en 2022 descendió a 826, frente a las 1.103 del año anterior. Según el informe de IVC y LeumiTech, en 2022 se recaudaron 14.950 millones de dólares en 663 rondas, un 42% y un 15%, respectivamente, por debajo de las cifras de 2021.
La mayor caída se produjo en la segunda mitad del año pasado, mientras que el primer semestre de 2022 mantuvo en gran medida la tendencia del año anterior, con las startups recaudando alrededor de 10.000 millones de dólares en 519 operaciones.
Sin embargo, en la segunda mitad del año, sólo se cerraron 313 operaciones, en las que las startups recaudaron 4.500 millones de dólares.
Además, la entrada de capital procedente de megaoperaciones (de más de 100 millones de dólares cada una) se deslizó al ritmo de 2018-2019, con 36 mega rondas a lo largo del año, que contribuyeron con el 39% del importe del año, frente a una cuota del 54% del importe total en 2021.
"Si hubiera dicho a finales de 2020 que las startups habrían recaudado 15.000 millones de dólares en 2022 nos habríamos alegrado por ello, pero después de lo ocurrido en 2021 ahora sabemos que es un momento difícil", explicó a Calcalist el CEO de Start-Up Nation Central, Avi Hasson. "
"Creo que las ramificaciones de 2022 continuarán en 2023 y 2024", agregó.
A pesar de las dificultades, Hasson cree que los próximos años podrían acabar siendo positivos para el sector tecnológico. "Hubo un mercado alcista durante mucho tiempo y a nivel macroeconómico la situación actual es saludable y necesaria", explicó. "También hubo muchas empresas que nunca deberían haberse fundado o levantado grandes rondas de seguimiento. Ahora se liberará mucho dinero para entrar en los lugares adecuados y los próximos años también pueden ser positivos para el sector", remarcó.
Pero Hasson cree que los despidos en el sector se intensificarán el año que viene. "Lo que vimos en 2022 fue como una aspirina. Creo que el año que viene las empresas verán caer sus ingresos y habrá recortes mucho más profundos y empresas que estarán en apuros. Es posible que veamos una situación en las empresas multinacionales en la que despidan a gente en un departamento pero contraten para otros. El número de empleados en alta tecnología en Israel creció en 2022 y el mercado también, pero no tanto. Creo que habrá más gente trabajando en el sector, pero se tardará mucho más en encontrar trabajo y las condiciones no serán tan buenas", sostuvo.
Según IVC y LeumiTech, el sector de la ciberseguridad sufrió el mayor golpe en 2022. Las startups cibernéticas recaudaron 3.500 millones de dólares el año pasado, una cantidad masiva, pero todavía casi la mitad de los 6.600 millones que recaudaron en 2021.
Las inversiones en fintech también cayeron significativamente hasta los 2.200 millones de dólares.
