En una ceremonia en la Casa Blanca, el presidente egipcio Anwar al-Sadat y el primer ministro israelí Menachem Begin firmaron el 26 de marzo de 1979 un acuerdo de paz histórico que terminó con tres décadas de hostilidades entre ambos países. Además, estableció lazos diplomáticos y comerciales.
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El presidente estadounidense Jimmy Carter felicita a su par egipcio Anwar al-Sadat y al primer ministro Menachem Begin tras la firma del tratado de paz entre Israel y Egipto.
(Getty Images)
Menos de dos años antes, en una iniciativa sin precedentes en un líder árabe, Sadat había viajado a Jerusalem para buscar un acuerdo de paz permanente con su vecino judío luego de décadas de conflicto. Esta visita, en la que se encontró con Begin y habló en la Knesset, el parlamento israelí, fue duramente criticada por la mayor parte del mundo árabe.
A pesar de la desaprobación de su aliados regionales, Sadat siguió buscando la paz con Begin y en septiembre de 1978 se reunieron una vez más en Estados Unidos, donde negociaron un acuerdo con el presidente americano Jimmy Carter en Camp David, Maryland. Este tratado, el primero entre el Estado de Israel y uno de sus vecinos árabes, estableció las bases para las relaciones comerciales y diplomáticas. Siete meses después se firmó formalmente.
Por su logro, Sadat y Begin obtuvieron el Premio Nobel de la Paz en 1978. Los esfuerzos de paz del mandatario egipcio no fueron aclamados en el mundo árabe y El Cairo fue suspendido de la Liga Árabe. El 6 de octubre de 1981, extremistas musulmanes asesinaron a Sadat. Sin embargo, la paz continuó sin él y en 1982 Egipto estableció formalmente las relaciones diplomáticas con Jerusalem.
