Parque Nacional Gan Hashloshá
Parque Nacional Gan Hashloshá en el norte de Israel.
touristlink.com
El joven de 23 años se ahogó mientras nadaba con sus amigos.

Un joven noruego se ahogó, y sus órganos salvaron la vida de cuatro israelíes

Howard Ionasen, de 23 años y oriundo de Noruega, se ahogó en una piscina cuando visitaba Israel junto a sus amigos, y luego de intentar reanimarlo, los médicos determinaron que tenía muerte cerebral respiratoria. La familia donó sus órganos, que se trasplantaron a cuatro israelíes

Dr. Itai Gal - Adaptado por Beatriz Oberlander |
Published:
La tragedia ocurrió la pasada semana, cuando Ionasen llegó al Parque Nacional Gan Hashloshá (más conocido como Sahne) y se ahogó. Al ser sacado del agua, lo sometieron a reanimación mientras lo trasladaban en estado crítico al hospital Ha’emek de la ciudad de Afula.
Ionasen fue internado en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital mientras continuaban los esfuerzos para reanimarlo. Pero al cabo de algunos días no hubo más remedio que determinar que tenía muerte cerebral respiratoria. Ante esta situación, la familia decidió donar sus órganos, que salvaron a cuatro israelíes.
Posteriormente, los órganos se trasladaron hacia distintos hospitales del país. El corazón se implantó en el Hospital Shiba a un paciente de 51 años con insuficiencia cardíaca. Los pulmones se implantaron a una paciente de 62 años en el Hospital Beilinson de Tel Aviv. El hígado y un riñón se implantaron a un paciente de 57 años en el Hospital Ijilov. Y el otro riñón se implantó a un hombre de 34 años también en el Hospital Beilinson.
1 צפייה בגלריה
Ionasen
Ionasen
El joven de 23 años se ahogó mientras nadaba con sus amigos.
(Ynet)
El joven noruego Ionasen viajó a Israel después de terminar su licenciatura en Biología, que combinaba con el estudio de la Biblia. Su visita a Israel ponía fin al capítulo de estudios. “Howard siempre fue una persona activa y creativa”, señalaron miembros de su familia, y agregaron que "le fascinaba la música: tocaba batería y el piano, cantaba en un coro, y también con su familia".
Además, comentaron que “siempre llevaba contigo una cámara y sacaba muchas fotos. Estaba muy interesado en todo lo que tenía que ver con la naturaleza, y en especial el mar. Le gustaba nadar y bucear, mirar peces y explorar a otras criaturas del mar. Y esto es lo que estaba haciendo cuando ocurrió el penoso evento".
“Era cariñoso y tenía empatía con todas las personas con las que se encontraba, siempre ayudaba a los otros, y por eso decidimos donar sus órganos, para que salven no sólo a los enfermos, sino también a sus familias”, destacaron.
Comentarios 0